Comienza a definirse otra megacausa contra YPF: ahora, por la mochila de Maxus

Comienza a definirse otra megacausa contra YPF: ahora, por la mochila de Maxus

La demanda es del estado de New Jersey por contaminación ambiental comprobada y realizada por una subsidiaria fallida, comprada en 1995 durante el Gobierno de Carlos Menem. La denuncia está radicada en Delaware.

Los juicios contra YPF en los Estados Unidos no le dan respiro al país. Al caso por la reestatización de la petrolera por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner se le suma desde hoy la definición de un megacausa heredada de los tiempos de Carlos Menem por la compra de la compañía Maxus, en 1995. 

Esta petrolera traía como mochila un juicio por daños ecológicos de los años 60 y 70, pero que no fueron tenidos en cuenta en el momento de adquirirla en aquel año; pero luego, a raíz de una acción de los damnificados por la contaminación del río Passaic por parte del estado de Nueva Jersey. La demanda da escalofríos: llega a los u$s14.000 millones. Sin embargo, desde Buenos Aires aseguran que los argumentos legales para defenderse son sólidos.

El demandante y el demandado deberán presentar hoy sus escritos en el territorio donde se desarrolla la causa: el tribunal de Delaware, donde alguna vez el fondo buitre Elliott, de Paul Singer, llegó a perseguir a la Argentina en los años de Cristina Fernández de Kirchner haciendo presentaciones por la causa de la “ruta del dinero K”. En ese mismo juzgado se desarrolla ese frente judicial, ya que la empresa Maxus estaba radicada en el estado de Delaware dados los beneficios impositivos que otorga el lugar.

La causa comenzó hace 60 años, cuando se comprobó que Maxus Energy Corporation vertió en los años 50 pesticidas Dioxin, fabricados en la planta Diamond Alkali, en la ciudad Newark, en Nueva Jersey, fábrica que en esos momentos era de su propiedad. La denuncia la hizo el propio Estado local, al confirmarse que el río Passaic contenía este producto, altamente cancerígeno y uno de los más contaminantes de vías fluviales; y utilizado por los marines norteamericanos en la guerra de Vietnam. El Diamond Alkali es uno de los componentes básicos del desfoliante Agente Naranja. Las primeras presentaciones datan de fines de los 60, pero fue luego durante toda la década del 70 donde el estado de Nueva Jersey profundizó las demandas. Ante el juicio, y por la mala imagen de la compañía, Maxus modificó su nombre rebautizándola Diamond Shamrock; empresa que luego fue vendida a Tierra Solutions, una subsidiaria de Maxus. A fines de los ’80, Maxus se la vendió a Occidental Petroleum Corporation (Oxy).

El caso continuó sin resolución durante décadas; pero siempre estuvo activo. En 1995, durante el Gobierno de Carlos Menem, luego de la apertura de las acciones de la petrolera a los privados y durante la gestión de José Estenssoro como presidente de la compañía; compró Maxus por unos u$s762 millones con el objetivo de expandir a YPF dentro del mercado norteamericano. Y de allí convertirla en una empresa multinacional. Estenssoro siempre confió en el potencial de Maxus, especialmente por las inversiones con las que contaba dentro del continente latinoamericano, particularmente en Venezuela, Ecuador y Bolivia. Maxus tenía una gran cantidad de deudas, las que se fueron saneando para luego comenzar un proceso de traspaso de activos hacia YPF por casi u$s1.000 millones.

Durante la gestión de Repsol, la empresa quedó abandonada, acumulando pasivos por más de u$s300 millones, sumando además deudas con proveedores y con su personal. (...)

Comentá la nota