Según aseveró un comerciante de la zona de la calle Lavalle y Alsina, los roedores comenzaron a aparecer hace alrededor de 2 meses y se desplazan libremente por calles, techos y cables. “Si pasas por acá a la mañana, las terminas pateando de la cantidad que hay”, expresó el dueño de un local.

El empresario presentó una nota en mesa de entrada de la Municipalidad en la que dio cuenta de la problemática. Además hizo referencia a que el camión de recolección de residuos pasa sólo una vez al día y remarcó que en la zona hay muchos restaurants, por lo que la producción de basura orgánica es muy alta. Al respecto, el comerciante sugirió que debería pasar al menos dos veces por día para evitar que se llenen los contenedores.

“Por si eso fuera poco, la gente de los carritos rompen las bolsas y esparcen su contenido en la calle y en la vereda para buscar lo que precisan, pero cuando se van dejan todo tirado. Si a eso le sumas que el barrendero hace varios meses que no pasa, tenés como consecuencia esta aparición de ratas y cucarachas con la que hay que lidiar para que no te invadan el local”, detalló el dueño de un restaurant que además subrayó los malos olores que se sienten en la zona. 

EDIFICIOS

Los edificios de departamentos no son ajenos a esta invasión: Los encargados se quejan por la aparición de estos animales que se filtran cuando se abre la puerta de entrada, pero también suelen entrar a las viviendas por los balcones, colgadas de algún cable.

PERJUICIO

Estas alimañas saldrían sobre todo de las cloacas cuando estas se tapan, por lo que los comerciantes piden que el Municipio haga mayores controles de desratización y elimine los focos de infección, además de una mayor frecuencia en el servicio de recolección de basura. Solicitaron también que se realicen las inspecciones correspondientes para corroborar la existencia del problema ya que esto les genera “un perjuicio económico y en la imagen de nuestros restaurants”.