A partir de hoy empezó a regir el nuevo cuadro tarifario en el servicio de energía eléctrica concerniente a la región metropolitana del país.

"Lo que tratamos de hacer fue corregir una discriminación tarifaria. El usuario de Capital Federal y Gran Buenos Aires va a estar más preocupado por su tarifa, va a aumentar más que las de las personas del interior del país", sostuvo el ministro, quien además destacó que la disposición es “dolorosa” aunque “necesaria”.

Según se estima, los aumentos podrían llegar a ser de casi 1.000%, según el nivel de consumo, ya que los cargos fijos de usuarios residenciales aumentarán entre 200% y el 400%, al tiempo que para los cargos variables los incrementos serán de entre un 140% y un 960%.

“Hay que reordenar los subsidios, que son una transferencia de recursos de una parte de la población a otra. Y lo que tenemos que asegurarnos es que vayan realmente a esas áreas de la economía de la sociedad que lo requiera", agregó el titular de la cartera de Energía

El nuevo cuadro tarifario comenzará a regir desde hoy y el ministro de Energía, Juan José Aranguren, justificó que los bruscos aumentos en la energía son "dolorosos", pero "necesarios" para "reordenar los subsidios".

Para Aranguren, el aumento de tarifas eléctricas que alcanzará a 3,3 millones de usuarios de las distribuidoras EDENOR y EDESUR, "es necesario", pese a que sea "doloroso".

El funcionario macrista se comprometió a controlar a las empresas concesionarias de la generación, transporte y distribución de la energía para que "inviertan el dinero que recibirán por las nuevas tarifas".

Con esta reestructuración, el Gobierno busca garantizarse un ahorro fiscal de 4.000 millones de dólares anuales que destinaría a otros sectores de la economía.