A poco de cumplirse los primeros dos años desde la quiebra definitiva de la empresa Curtarsa, sus instalaciones muestran la primera reactivación productiva como parte del proyecto de establecer un nuevo parque industrial en la localidad de Jáuregui. En septiembre pasado, el predio fue adquirido por el empresario Carlos Diforti, dueño de la ex Algodonera Flandria. En aquella oportunidad, aseguró a este medio que la tan cuestionada actividad curtidora no volvería a Jáuregui y, en cambio, se proponía reacondicionar el lugar para el funcionamiento de diversas empresas. 

En ese camino, las instalaciones de la ex curtiembre ya cuentan con la primera firma. Se trata de la empresa Burgert, originaria de Lanús, que decidió mudar su actividad desde el Parque Industrial Villa Flandria al nuevo sitio, luego de alcanzar un acuerdo con los propietarios del lugar. Según los datos que figuran en su página web, Burgert está vinculada al negocio de las pinturas desde fines de la década del 40: "Actualmente es una empresa con más de 8.000 productos desarrollados para los más exigentes requerimientos industriales", publicita.  

Para su planta de Jáuregui, el objetivo inmediato apunta a la adecuación de algunas instalaciones a los fines de comenzar con la producción centrada en las combinaciones de pinturas a gran escala.   

"Se dedican al acopio de pinturas y están terminando una instalación nueva para destinarla a la mezcla de pinturas en gran escala. Es una empresa sana y muy prolija", aseguró Diforti. 

En cuanto al camino recorrido desde la compra del predio hasta la actualidad, el empresario indicó que al tomar la posición se encontraron con maquinaria en mal estado, desmantelada o dañada. En ese contexto, "comenzamos con las obras de mantenimiento, empezamos a pintar, a realizar trabajos de jardinería, a colocar las bombas de agua que ya no estaban". 

Diforti marcó que se trata de un proceso lento "que vamos haciendo poco a poco, también esperando los tiempos para tener la titularidad definitiva del predio y poder publicitar la propuesta a otras empresas". En agosto pasado, se efectivizó el último desembolso de dinero que cubrió el monto de 30 millones de pesos más intereses de la venta dispuesta por la Sindicatura. 

En paralelo, el empresario indicó que esperan la titularidad del predio para iniciar los trámites que permitan habilitar el complejo como parque industrial, según una serie de requisitos que impone Provincia. 

"La idea es ir adaptando el lugar sobre la marcha según las necesidades de las empresas, contemplando el tipo de pisos o desagües que necesitan, entre muchos otros aspectos", explicó.

En cuanto a la planta depurada y sus posibles usos accesorios a la actividad industrial, Diforti insistió con la posibilidad de procesar un futuro servicio de cloacas de Jáuregui y zonas aledañas: "La idea sigue siendo alcanzar un acuerdo con el Municipio y con la Cooperativa Eléctrica para ver la posibilidad de hacer el tratamiento cloacal. Las ganas y las intenciones están, resta terminar de definir si técnicamente lo podemos hacer, no tenemos plena seguridad de que se pueda hacer, pero la voluntad está". 

Un tema que entre los vecinos de Jáuregui suele estar presente en cuanto al desarrollo fabril de la localidad está vinculado a un viejo pedido de habilitar un camino alternativo para evitar que los camiones ingresen al pueblo. Para eso, se piensa en una salida directa hacia la ruta 5. Al respecto, Diforti indicó que desde la Municipalidad "nos dijeron que está avanzado el tema en cuanto a los permisos y habría que ver la forma de construir el acceso, especialmente resolver el cruce de la vía que es lo más complicado, pero hay voluntad de todas las partes de poder hacerlo porque significa una salida rápida para las empresas del parque".

En referencia a los ex trabajadores de Curtarsa y la opción de que se priorice su contratación, Diforti dijo que "nosotros hemos tomado varios empleados de la curtiembre. Incluso pusimos una cantidad de avisos. La mayoría ha podido ubicarse, porque realmente esperábamos muchas más personas de las que se presentaron".

Inundación

Consultado sobre el impacto que sufrieron las empresas instaladas en el Parque Industrial Villa Flandria por las últimas inundaciones, Diforti indicó que "el daño fui cuantioso, especialmente en nuestra empresa, donde el agua entró en la sección de Tejeduría y nos mojó los 80 telares y algo de mercadería". 

"Otras empresas han tenido daños menores y mayores inconvenientes por los días sin actividad. Nos propusieron un plan de ayuda de 2.000 pesos por persona para las empresas afectadas. Hay algo de 10 empresas sobre un total superior a 20", agregó.