Con el objetivo de mejorar la seguridad vial en la capital provincial, la semana pasada el Gobierno de la Ciudad comenzó a realizar test de narcolemia a los conductores tanto de vehículos particulares como del transporte público. Estos exámenes se suman a los a los operativos para el control de alcoholemia que ya se llevan adelante con presencia de profesionales médicos e inspectores de la Dirección de Tránsito del Municipio.

En esta primera semana se concretaron nueve test y ninguno arrojó resultado positivo. Vale destacar que en los días de la semana se hicieron los chequeos sólo a los conductores del transporte público; y del viernes al domingo también se realizaron a los vehículos particulares. Es necesario aclarar que los análisis se hacen por pedido de los profesionales médicos a partir de síntomas que presentan los ciudadanos.

"En la primera semana de implementación de esta modalidad de control se hicieron nueve test de narcolemia. Todos fueron hechos por pedido de los médicos que forman parte de los operativos a partir de que las personas manifestaban dilación de pupilas u otros síntomas. Todos dieron negativos. Se hicieron a vehículos comunes y también del transporte público", explicó el secretario de Control del Gobierno de la Ciudad, Ramiro Dall'Aglio. En esta misma línea, agregó: "Fue una buena experiencia porque nos permite familiarizarnos con el dispositivo y de esta manera adquirir más práctica en los controles. Esperamos continuar con los chequeos y también se van a ir incrementando; y ojalá sigan dando estos resultados. La difusión sirve mucho y sobre todos para que tomen conciencia los ciudadanos porque los que manejan bajo el efecto de los narcóticos también van a ser controlados".

Cabe señalar que los nuevos tests tienen su marco normativo en la Ordenanza Nº 12.264, a través de la cual se solicita la modificación del inciso b del artículo 65º de la Ordenanza Nº 10.017 del Reglamento General de Tránsito de la ciudad, incorporando la realización de controles de detección del consumo de estupefacientes en conductores. Las sustancias que permite identificar el dispositivo utilizado para estos exámenes son THC Tetrahidrocanabinol (marihuana); OPI Opiáceos (morfina); COC Cocaína (cocaína); BZO Benzodiacepina (diazepan); AMP Anfetamina (dextroanfetamina); y MET Metanfetamina (D-metanfetamina).

 

Sanciones y procedimiento

Santa Fe es uno de los pocos municipios en donde los tests son realizados por médicos, lo que permite incorporar una mirada clínica, y eso es lo que establece la necesidad de realizar el control de narcolemia. La intención del Gobierno de la Ciudad es incorporar este tipo de tecnología para dar más seguridad en el tránsito.

Si bien en la primera semana de implementación todos los test dieron negativo pero, en el caso que arrojen resultados positivos, se retiene el vehículo, se labra un acta de infracción y después están las actuaciones del Tribunal de Faltas que estipula la multa. "Pero lo más importante es la cantidad de días que tiene que dejar de manejar -entre 15 y 45 días-, durante los cuales se lo inhabilita retirándole el carnet de conducir", recordó Dall'Aglio.

El procedimiento en la vía público de este tipo de controles comienza con la entrega por parte del médico de los instrumentos para el análisis al conductor examinado. Este se coloca un dispositivo en el interior de la boca para tomar la muestra de saliva necesaria para el examen. Posteriormente el médico continua con el proceso a través de un casete de análisis que mediante reactivos, determinarán si existen sustancias no permitidas en el cuerpo. Finalmente, y luego de unos minutos, se informa a través de un monitor el resultado obtenido, pudiéndose imprimir un ticket con el detalle del resultado.

El test de narcolemia, se realiza con un dispositivo denominado Draguer Drugst Test 5000 STK, que es utilizado en otras localidades del país donde se efectúan dichos controles, como Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Bahía Blanca, Rosario y Córdoba. El equipamiento, adquirido por la Secretaría de Control, demandó una inversión de $ 171.476, teniendo el kit a utilizar en cada control un costo de $ 1.100.