En un escenario en que las señales valen más que los discursos, el periodista de Página 12 Horacio Verbitsky reparó en un detalle del acto que el hijo de la Presidenta, Máximo Kirchner, encabezó en Argentinos Juniors y que prendió las alarmas en el escenario bonaerense: su partida de nacimiento.

En su extensa columna dominical, Verbitsky sostuvo que es “llamativo que a una semana del acto en Argentinos Juniors siga pasando inadvertido el principal mensaje de Máximo Kirchner” desde el palco, ¿cuál? La referencia a La Plata, ciudad en la que, aclaró, nació.

Para el editorialista, cercano al núcleo duro del kirchnerismo, “el dato era conocido”, por lo cual, traduce, “la mención en el final de su primer discurso público” es “un dato político” antes que personal y “significa que la hoja de ruta que consulta el primer hijo de dos presidentes en la historia argentina no es el anacrónico proyecto de repetir la carrera de su padre, compitiendo por la intendencia de Río Gallegos”.

Verbitsky separó la trayectoria de Máximo de la de su padre, quien, precisó, comenzó en Santa Cruz “porque no tenía otra construcción política que su ateneo peronista en la capital” de esa provincia. “Su hijo, en cambio, dedicó los últimos ocho años a crear y construir una organización nacional. A partir del acto del sábado 13, su potencia e inserción son inocultables”, evaluó.

Si bien aclaró que su análisis “no quiere decir que exista una decisión tomada”, reparó en que “La Plata es la capital de la provincia de Buenos Aires, y haber nacido en su territorio es una de las cualidades que las constituciones Nacional y Provincial requieren para aspirar a cargos electivos, como la gobernación bonaerense o una banca en el Congreso de la Nación”. Una puerta que, al menos desde lo estrictamente legal, Máximo Kirchner tiene abierta.