Son las 7.30 y Julio Cobos ya es acechado por un enjambre de periodistas de la radio y la televisión locales en la sala de presidencia del comité radical, el mismo lugar en el que anteayer festejó su arrasadora victoria por más de 20 puntos sobre el kirchnerismo. Franqueado por un cuadro de Raúl Alfonsín y una antiquísima foto suya con banda presidencial y bastón de mando en la que no mostraba tantas canas como en la actualidad, levanta la mano y pide otro café. Sólo minutos más tarde logra huir del raid mediático, pero por poco tiempo. "Tenés los lentes", le grita a Fabián, el chofer que lo acompañó los 20.000 kilómetros en los que -dice- puede medirse la campaña que los tuvo atrapados a él y su equipo desde febrero pasado. Tiene los ojos enrojecidos y cansados. Sólo durmió dos horas. Pensando que ganó un momento de tranquilidad, enfundado en una chomba azul y unos simples jeans, salta en el asiento delantero de una Ecosport negra. Detrás lo sorprende LA NACION. Ésta es una entrevista itinerante. " Cristina va a tener que modificar el rumbo porque la economía se lo va a exigir", sentenció Cobos. El flamante diputado nacional electo estimó que aún no se siente presidenciable para 2015 , pero ratificó que sí será uno de los principales ingenieros de una construcción entre varios partidos que conformará una alternativa al kirchnerismo en 2015.

-¿Cuál fue el mensaje de los argentinos en estas elecciones?

-Fue un pedido al Gobierno para que retome la agenda de la sociedad, recupere el diálogo y corrija el rumbo en materia de economía y seguridad. La sociedad se volcó hacia otra fuerza que cree que puede incidir en el Gobierno para construir esa agenda.

-¿Se siente candidato a presidente en 2015?

-[Risas.] No, me siento diputado nacional con una vocación, sí, de colaborar para construir un espacio más amplio junto con otras fuerzas con las que ya hemos hecho alianzas electorales en distintos distritos y con la fuerte vocación de construir metas colectivas. Pero no hay que anteponer aspiraciones personales porque eso puede ser un obstáculo.

-Pero sus primeras palabras de ayer fueron las de un ex presidente radical (Alfonsín).

-[Risas.] Y sí, porque hay que ponerlo en valor. Porque justamente estamos transitando 30 años de democracia institucional, pero falta construir la democracia del bienestar, y Alfonsín nos legó este respeto que tiene el radicalismo por las instituciones, que son esenciales para consolidar el crecimiento, el desarrollo y el bienestar de la sociedad. Cada vez que puedo usar frases que fueron un ejemplo, creo que es bueno recordarlas y ponerlas valor, porque hacen justamente a la recuperación de los valores que estamos perdiendo.

-¿Cómo cree que tomará el Gobierno estos resultados?

-De acuerdo con algunas expresiones que escuché, no en el sentido que me gustaría. No creo que se dispongan a la apertura necesaria de diálogo y búsqueda de acuerdos para la resolución de problemas estructurales. Lamentablemente, no creo que me equivoque. Es la manera en la que el Gobierno ha transitado estos años. No veo nada que lo haga cambiar sus formas de gobernar.

-Usted la conoce bien a Cristina Kirchner, ¿los próximos dos años de su gobierno serán de corrección o de profundización?

-Aunque no les guste, van a tener que hacer correcciones, porque este modelo no tiene nada que ver con sus inicios, que hablaban de superávit fiscal, balanza comercial en crecimiento, balanza energética favorable, un dólar competitivo o reservas custodiadas. Ese modelo ya no existe. Cristina va a tener que modificar el rumbo porque la economía se lo va a exigir.

-¿Van a peronizar la UCR para encolumnarse detrás de su figura y terminar con las internas?

-[Risas.] No hace falta. La UCR ha sido siempre un partido horizontal. No debemos caer en internismos innecesarios para definir liderazgos. El partido tiene que definir su conducción partidaria y esperemos que encontremos un consenso. La ciudadanía nos quiere ver trabajando en temas de agenda de la sociedad.

-En su festejo faltaban dirigentes de peso a nivel nacional como, por ejemplo, Ernesto Sanz...

-Ernesto Sanz estaba en el comité nacional. Me llamó, y también en las primarias. Hablé con varios dirigentes a nivel nacional.

-¿Habrá internas o definición por consenso en la búsqueda de candidatos para 2015?

-Dependerá del espacio que conformemos. Si la estrategia es la participación en el sistema de primarias, me parece que sería lo más saludable. Pero habrá que ver.

-¿Cómo logrará la unidad la UCR en el plano bonaerense?

-No, tenemos que mejorar ahí. Hay que buscar renovación de la dirigencia.