Clave para Macri: define PJ la unidad en el Senado

Clave para Macri: define PJ la unidad en el Senado

El convite a mandatarios provinciales de parte del jefe de la bancada, Miguel Pichetto, servirá no sólo para preservar el bloque, sino también para definir estrategia 2017. Tironeos por ART y Banco Central.

Las discusiones íntimas que tuvo en las últimas semanas el bloque del Frente para la Victoria en el Senado, que amenazan con convertirse en un empujón hacia el quiebre de la bancada que comanda Miguel Pichetto, obligaron al rionegrino a despertar del letargo de los últimos ocho años a gobernadores y sindicatos para equilibrar la desquiciada brújula del PJ y convertirse en partícipes de definiciones que se precipitarán desde esta semana.

El proyecto de reforma electoral, el análisis de los pliegos del directorio del Banco Central, las modificaciones del Régimen de Riesgos del Trabajo (para dinamitar la denominada "industria del juicio") y una iniciativa que crea una agencia que definirá qué procedimientos y medicamentos ingresarán o no al Programa Médico Obligatorio mixturaron las grietas dentro del FpV en el Senado, y ya no sólo entre peronistas y ultrakirchneristas.

De estar acostumbrados a sancionar casi sin posibilidad de análisis o cambios la mayoría de los proyectos que enviaba Cristina de Kirchner, los senadores del FpV descubrieron las ventajas, como representantes de las provincias, de abrir un poco el juego y hacer política como oposición y con la ventaja de ser mayoría en esa Cámara. A algunos aún les cuesta eliminar el óxido y ponerse en forma, aunque en la vereda de enfrente, el oficialismo también encontró serias dificultades para comprender el cambio de roles que le deparó el voto popular. 

Mientras el ultrakirchnerismo se cegó en el Congreso, el peronismo parlamentario del Senado se preocupó por cachetear a los gobernadores y recordarles el poder de negociación que tienen en sus manos. Así se pudieron votar leyes clave para el oficialismo a cambio de reconocimientos económicos para los distritos. Sin embargo, el cierre del telón 2016 activó nuevas rispideces.

"Muchachos, ustedes son los gobernadores del PJ y los que tienen el poder en las negociaciones. Vayan y juéguense el pulso con la Casa Rosada. Nosotros bancamos en los recintos, pero ustedes tienen que ir a negociar". Eso se escuchó, hace poco más de un mes, en el Consejo Federal de Inversiones. Allí, legisladores del FpV se vieron con mandatarios provinciales para analizar los avances del Presupuesto 2017.

El próximo jueves, Pichetto y parte del bloque del FpV se verán con los gobernadores para conocer, ya sin especulaciones, sobre la reforma política. La bancada también espera a los sindicatos para conocer la postura sobre el proyecto de ART, que según el Gobierno nacional se debatirá en sesiones extraordinarias. "Hasta que no escuchemos a los muchachos, no podemos tomar postura", señaló un asesor de primera línea del bloque a Ámbito Financiero.

Las quejas de los mandatarios para el jueves próximo ya florecen. Más allá de mantener la vetusta postura de continuar con la boleta sábana de papel por la supuesta vulneración del voto secreto de las nuevas tecnologías -es decir, la simple lógica de enumerar los años en el poder del peronismo en gobiernos nacionales y provinciales bajo el sistema actual como argumento para minimizar los "vicios" de elecciones varias y defender la utilización del "aparato"-, los gobernadores se hartaron del puenteo que hizo Casa Rosada con intendentes de provincias lideradas por el PJ vía el Ministerio del Interior que lidera Rogelio Frigerio. Otros apuntan al cierre de los permisos del Ministerio de Hacienda y Finanzas para que los distritos puedan tomar deuda en el exterior y contar con más oxígeno para la próxima temporada.

Retornar a las bases, a los gobernadores y a los sindicatos. El llamado de Pichetto puede, el próximo jueves, convertirse en un refugio del PJ para hacer control de daños y esperar al nuevo líder del partido, que deberá aparecer en las elecciones de 2017.

Comentá la nota