Clausuraron dos comercios y un hotel por falta de habilitación en Villa Mercedes

Clausuraron dos comercios y un hotel por falta de habilitación en Villa Mercedes

El cierre preventivo del hospedaje fue por orden de la Justicia. En el caso de los locales, el Municipio actuó de oficio.

El fin de semana comenzó bastante movido para los empleados de la Unidad de Control e Inspección Municipal (UCIM). En un día clausuraron de manera preventiva tres locales: un hotel alojamiento, un gimnasio y una rotisería. Ninguno de los comercios contaba con habilitación y presentaban irregularidades edilicias.

 

La primera parada de los funcionarios municipales fue en el albergue transitorio "Top". El motel ya había sido clausurado en más de una oportunidad a pedido del Tribunal de Faltas por no contar con el permiso comunal. Jorge Rodríguez, coordinador de UCIM, explicó que los propietarios "no presentaron los planos de la obra, entonces nunca pudieron tener la habilitación. Aún así, siguieron con su actividad".

 

Rodríguez señaló que debido a las reiteradas infracciones, el caso pasó a la Justicia ordinaria. "En este caso actuamos por una orden de la Segunda Circunscripción, que está a cargo del juez Santiago Ortiz, para corroborar que el hotel estaba cerrado. Pero nos encontramos con que había personas que estaban alojadas, por lo que decidimos colocarle nuevamente la faja de clausura".

 

Silvia Acosta, una de las inspectoras, agregó que para evitar que los dueños retomen con el servicio debieron "intervenir las puertas y cortarles el teléfono"; y resaltó que en "ningún momento los empleados se resistieron a la orden del juez".

 

Pocos minutos después, las camionetas de la Unidad de Control e Inspección llegaron hasta una rotisería de la calle Chile, a pocos metros del barrio 960 Viviendas. "Recibimos un llamado al Sistema Único de Reclamos (SUR) por un comercio gastronómico que no cumplía con las normas bromatológicas y acudimos a corroborarlo", dijo el responsable de UCIM. Cuando llegaron al comedor se encontraron con un gran derrame de aguas servidas que iba desde adentro hacia afuera del local. "Aparentemente tenía problemas en los inicios de construcción y en los caños, por lo que se producían los derrames internos y externos. Ahora el propietario deberá presentar el plan de obras y en caso de que se apruebe veremos cómo sigue", detalló.

 

Al igual que en el caso anterior,   el personal municipal recibió una alerta a través del SUR por un edificio ubicado en la avenida Mitre 922 que funcionaba como gimnasio y centro de estética. "Lo primero que notamos fue que uno de los balcones de la casa se está rompiendo. Es muy peligroso porque abajo funciona un quiosco por el que entran y salen muchas personas todo el tiempo. Puede caerse la mampostería y lastimar a alguien", manifestó Claudio Guerrero, del área Obras Privadas.

 

El funcionario agregó que cuando ingresaron al centro de estética detectaron que además una de las  escaleras que utilizaban para evacuación, no estaba en condiciones. Guerrero señaló que la casona forma parte del patrimonio histórico de la ciudad. "Ahora debemos evaluar cómo refaccionamos el balcón, que es lo que más nos preocupa. Ya intimamos al inquilino para que lo arregle. Tenemos entendido que va a poner a un profesional que hará la restauración".

 

Jorge Rodríguez indicó que los dos últimos cierres preventivos fueron de oficio y que dieron con la ubicación de los locales "gracias a que la gente denuncia al 147. Es importante que nos avisen, de esta manera hemos logrado localizar tanto comercios como fiestas clandestinas o carreras de perros. Sin dudas, es una herramienta que tiene mucha utilidad".

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