Con Cheppi hay futuro, como en Venezuela

Seguramente, al comandante Chávez le habrán resultado más amenas las embajadoras Alicia Castro y Nilda Garré, que Carlos Cheppi a Nicolás Maduro. Cheppi aparece como en el tango de Aníbal Troilo, “siempre está volviendo”.

El embajador argentino es atendido por el diario La Capital, en la columna “Sordo, Ciego y Mudo”, en la que lo someten sin contemplaciones, a veces sin nombrarlo, por ejemplo vinculándolo con la firma Consultar Latinoconsult S.A. “con la cual Venezuela detectó una obra pública con sobreprecio millonario. Esa misma empresa, también fue contratada por firmas de esta ciudad, para exportar productos a Venezuela”, según el diario La Capital. El mismo matutino oficialista dice que “Cheppi supera con su sueldo a la propia CFK y a la cotización del día de la publicación cobraría la friolera de $ 321.000 mensuales”. Lo cual explica cómo “invirtió” $ 8.000.000 en sólo una campaña electoral.

La embajada en Venezuela es una coartada perfecta para el ingeniero agrónomo. Sostiene públicamente que hay normalidad en Caracas y que el problema de Venezuela se reduce a 300 familias. Una verdadera impudicia verbal si nos atenemos a la información internacional.  El embajador le cuesta a los argentinos U$S 28.000 dólares mensuales y está (en ese sentido) entre los top de los diplomáticos en el exterior.

No son pocos los temas que vinculan a nuestro país con el hermoso país del Caribe. En principio la oposición al régimen chavista reclama a la Argentina U$S 10.000.000.000 un monto que dejaría más exhaustas a las reservas de libre disponibilidad del BCRA. Cheppi candidato se puso en marcha con la leyenda (en los carteles) “Con Cheppi hay futuro”, luego “Cheppi es Cristina” y finalmente “El candidato es el proyecto”. Evidentemente se fue encogiendo sin poner la cara, como cuando le tocó defender la 125 y Néstor Carlos lo mando al pelotón de fusilamiento.

Que el Frente Para la Victoria espere a Cheppi con alguna expectativa para pelear por un cargo sometido a las urnas, es todo un tema. El mismo se define como un soldado del Movimiento Nacional y Popular, muy posiblemente esté en condiciones de explicar cuál ha sido la participación argentina en ventas de granos con sobreprecios, las operaciones de triangulación con Irán, la política de Derechos Humanos en Venezuela, los presos políticos en ese país, la falta de elementos básicos para la población, la primera inflación del mundo etc. etc.

A la hora de investigar “La década ganada”, Cheppi no será un personaje menor. Sería interesante escuchar explicaciones políticas a los escándalos de proporciones que han signado nuestra relación con los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.

Los elementos de análisis indican que la posible llegada de Cheppi a Mar del Plata, es una maniobra de distracción, para ganar tiempo y terminar de asumir que deberán ir como Frente Para la Victoria, colgados del Frente que arma el intendente Pulti, que aparece como generoso, pero que en realidad persigue los votos de los denominados K duros, sin pagar los gastos.

Pulti es una salida para el Frente Para la Victoria y para La Cámpora, no hay sólo un candidato que mida razonablemente y en el HCD se han convertido en un bolsón de intrascendentes, que en patota amenazan a periodistas y luego se esconden con la complicidad del ex presidente del cuerpo legislativo, el radical Nicolás Maiorano.

Cheppi, bancado por Julio de Vido y José Francisco López (el 2 de Planificación) es un armador de negocios entre Argentina y Venezuela, una fuente de recursos que ampara la inmunidad  que otorga la diplomacia.

El ex técnico del INTA nada dice por ejemplo de los siguientes temas en Venezuela: que el dólar aumenta a razón del 40 % por semana, que con la ley de abastecimiento en los súper mercados falta de todo, que en las farmacias sólo hay pasta dental, vitaminas, bronceadores, mientras carecen de analgésicos, anticonceptivos, vacunas, jeringas etc. Le adjudican la falta de papel higiénico a que la gente come más.

Por las dudas y como una contribución a marplatenses y batanenses, hay que despejarse y estar atentos a ver si encima convertimos a Mar del Plata en Caracas.

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