La planta cloacal de Centenario está colapsada. A casi dos años de que el Municipio local tomara la decisión de clausurar un baipás y no arrojar líquidos crudo al río Neuquén, hoy el sistema de tratamiento funciona al límite.

Así lo confirmó el intendente local, Esteban Cimolai, quien aseguró que está en carpeta un proyecto de readecuación del sistema que, en una primera etapa, cuesta unos 200 millones de pesos para lograr el saneamiento de la planta cloacal y en las redes de la ciudad.

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Hace unos días, en el marco del aniversario de la localidad, el gobierno provincial anunció un aporte de 20 millones de pesos como adelanto para este proyecto, que está en las oficinas del Ente Nacional de Obras Hídricas Sanitarias (Enohsa) y no tiene objeciones técnicas.

“Necesitamos que las autoridades nacionales escuchen a los municipios que tomaron la decisión de no contaminar el río. Esto tiene un costo social y económico”, dijo Esteban Cimolai, Intendente de la ciudad de centenario

“A los cinco días de asumir, me cayó una causa penal por contaminación, sin haber hecho nada y por la situación en la que estaba la planta, por eso tomé la decisión de invertir 200 millones en saneamiento”, explicó el jefe comunal.

El problema es que cada vez hay más conexiones cloacales en la ciudad y la planta no da abasto, con el pozo de ingreso al sistema que sube de nivel con riesgo de colapso.

El intendente dijo que muchas de las pérdidas cloacales en la ciudad se deben a que hay más agua en el sistema y que las viejas cañerías nunca se cambiaron.