Una causa por evasión liga a una tabacalera salteña con Tomeo

Una causa por evasión liga a una tabacalera salteña con Tomeo

Tabes tiene su planta clausurada y cien trabajadores en estado de incertidumbre. Investigan una red de fábricas clandestinas que perjudicó a la AFIP en $1.000 millones.

Tabacos Especiales (Tabes), firma radicada en el Parque Industrial de Salta, está clausurada desde hace once días por una causa ligada a Carlos Tomeo, el empresario porteño al que le encontraron $4 millones, en cajas de cartón, en una lujosa propiedad de Berazategui.Cerca de cien trabajadores de la planta salteña, que en épocas de acopio duplica la ocupación de mano de obra, esperan que se levante la medida enmarcada en la investigación de una red de fabricación ilegal de cigarrillos con ramificaciones en el Gran Buenos Aires y Corrientes.Tomeo, el principal imputado de la causa abierta por una evasión impositiva del orden de los $1.000 millones en perjuicio de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), también es investigado por presunto lavado de dinero relacionado con cajas negras de la política.La Justicia sospecha que una de sus empresas, Espert, una tabacalera instalada en el cordón industrial de Berazategui, tercerizó su producción de cigarrillos de bajo costo, con fábricas clandestinas, para evitar el pago de impuestos que representan el 80% del precio final de los atados.Federico Villena, juez Federal de Lomas de Zamora, ordenó desde comienzos de mes una serie de allanamientos que terminaron con tres fábricas clandestinas cerradas en Lomas de Zamora, Valentín Alsina y Temperley, en el sur del Gran Buenos Aires.En los procedimientos, la Policía Federal secuestró 124 cajas con documentación contable de proveedores, clientes y circuitos de transporte, como así también cartones de cigarrillos de las marcas Melbour, Lee Blue, Paladium, Mill y Marble.En base a las constancias reunidas en el expediente, también fueron allanadas las plantas de Tabes, en la ciudad de Salta, y de otra tabacalera de la localidad correntina de Goya, que están con fajas de clausura y con consignas policiales desde el pasado 17 de septiembre.No es la primera vez que Tabes queda en el ojo de la tormenta. En septiembre de 2014, ante una presentación de la AFIP, el juez federal Julio Bavio dispuso el secuestro de sus máquinas hebradoras, ante presuntas irregularidades fiscales y dudas sobre el origen del tabaco acopiado, su industrialización y venta.Meses después, sin embargo, la Cámara Federal de Apelaciones de Salta ordenó restituirle las maquinarias, tras hacer lugar a una apelación en la que la empresa esgrimió omisiones procesales y falta de parcialidad en el juez Bavio.80 por ciento del precio que el fumador paga por el paquete de cigarrillos es la carga impositiva que tributa el producto. En 2015, según estimaciones, la AFIP perdió de recaudar $4.500 millones por contrabandos, fabricación y venta ilegal de atados.Tabes tiene su planta de procesamiento en avenida Durañona 255. En ese mismo predio del Parque Industrial de Salta funcionó la desaparecida firma tabacalera Miguel Pascuzzi e Hijos. En los últimos registros societarios publicados por el Juzgado de Minas y de Comercio de Salta, a comienzos de 2009, figuran como presidente del directorio Yago Mariano Arce y como director suplente Roberto Horacio Ávalos.En Goya, donde se allanó y clausuró otra de las plantas, opera una empresa que constituyeron el 11 de abril de 2012 un abogado de Buenos Aires, Ricardo Soderlund, y Miguel Pascuzzi. La firma se llama Compañía de Tabacos La Tercera, fue inscripta en Salta y figura como presidente Antonio Rafael Pirillo.ELEMENTOS SECUESTRADOSEn los allanamientos que se llevaron a cabo desde comienzos de mes en el conurbano bonaerense se secuestraron insumos para la fabricación ilegal de cigarrillos por un valor estimado de $20 millones, cuatro vehículos utilitarios, un camión y estampillas apócrifas.Además se incautaron 5 millones de cigarrillos falsificados listos para empaquetar, 2 millones de cigarrillos empaquetados, dos líneas completas de maquinarias para producción, dinero en efectivo y hasta una arma de fuego.En las plantas de Valentín Alsina y Temperley se fabricaban no solo cigarrillos truchos Melbour, sino también de Marlboro y otras marcas adulteradas.

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