La abogada Soledad Varas, comentó el hecho en el que la madre involucra a una persona que mantuvo amenazado a su hijo a lo largo de algunos años.

 

La abogada que patrocina al único imputado en la causa, Matías Oliva, dialogó con Radio Fénix  y sostuvo “es importante que el querellante sostenga esa hipótesis”, dijo en referencia a las suspicacias en torno a que habría una segunda persona involucrada.

 

“Considero que ninguna de las testimoniales perjudicó ni beneficio a mi cliente, sino que siguen la misma situación, que Oliva se encontraba en la casa de la familia De Simona, y fueron vistos por varias personas que ingresaron a la vivienda. Esa situación se repite a lo largo de todas las testimoniales”, apuntó.

 

Comentó entonces, que el dato importante lo introduce la madre que crea otra hipótesis la cual el juez debe investigarla para confirmarla o descartarla.

 

La madre indica que su hijo no era bien visto por la barra de jóvenes del CGT, sosteniendo que, “le tenían bronca, le decían cosas, le tenían una suerte de envidia, se le burlaban y da el nombre de una persona, y lo indica como el referente de la venta de drogas en el barrio” aseveró la letrada sobre las declaraciones de la mujer.

 

A su entender, “es una grave declaración y confirmación de la madre. Dice que esta persona es el referente de la venta de drogas en el barrio CGt y que hace dos años lo habría amenazado a su hijo y lo mantenía así, lo que hace que ella como madre concurra a la Policía Federal y efectúe la denuncia correspondiente”.

 

“Ella hace una suerte de interpretación de los hechos y concluye en que es muy probable que su hijo haya sido muerto por encargue”, expuso.

 

La abogada, resumió que, “eso indicaría a Oliva como un mero ejecutador de los hechos”.

 

“Es una causa en la que nos llamó la atención porque no existe el móvil de la muerte de Taboada teniendo en cuenta la forma en la que se lo ejecutó, posiblemente inyectado con una sustancia, y ese suministro se lo hizo consentido, porque no registra ningún tipo de agresión física que tienda a determinar que fue suministrado por la fuerza”, subrayó Varas.

 

Agregó que, “Inclusive hay una testigo que afirma haberlo visto descompuesto en compañía de oliva.

Aparentemente diferencias personales llevó a la madre a denunciar a esta persona”.

 

La letrada comentó que, “hubo coincidencia entre varios testigos que decían que la victima si bien cultivaba su cuerpo, no era adicto a las drogas. La mama de Taboada confirma que fue un crimen por encargo”.

 

“Esto abrió una nueva hipótesis que el juez tiene la obligación de investigar”, expuso.

 

Inclusive, comentó que la madre de Taboada indicó al juez que la persona que ella involucró fue el día del velatorio de Mario a darle su pésame, lo cual le resultó un momento de mucha incomodidad.