De a poco, la Policía va echando luz sobre el misterioso crimen de Jorge Luis Espínola, el anciano de 85 años que fue encontrado muerto de al menos 3 puntazos en el cuello el último sábado en un departamento que alquilaba en una casa de Ruperto Godoy al 6011, en el barrio Camus, Rivadavia. Fuentes policiales informaron que los pesquisas de Homicidios descartaron la posibilidad de que al jubilado lo hayan matado en ocasión de robo debido a que en la vivienda no faltaba ningún objeto de valor.

En medio de la investigación, creció con fuerza la hipótesis de que el crimen esté ligado a una cuestión pasional y esa idea se sustentaba en los dichos de un vecino, quien refirió ver en varias oportunidades jóvenes visitando al anciano, indicó una alta fuente policial. Por eso, los investigadores estaban concentrados anoche en tomar declaraciones en los allegados al anciano para ver si obtenían alguna pista que los lleve al asesino.

En la Policía dijeron ayer que quedó descartada la idea de que Espínola fuera asesinado en un robo porque efectivos de Criminalística, supervisados por el juez de Instrucción Alberto Benito Ortiz, hallaron su celular Nokia, el cual pensaban había sido tomado por el asesino. Otro dato que trascendió ayer es que el anciano fue asesinado 48 horas antes de que lo encontraran y que quien lo mató cerró todo y se llevó la llave del departamento, señalaron fuentes policiales.

Además, secuestraron 3 cuchillos de la casa de Espínola que serán peritados para ver si alguno es el arma homicida.