El Tribunal de Impugnación, integrado por los jueces Mabel Folone, Federico Sommer y Héctor Dedominichi, rechazaron el recurso que había presentado el Fiscal jefe de la IV Circunscripción Judicial, Fernando Rubio, para impugnar la resolución que les concedió a Nahuel Hernández y Andrés Cahuimpan la prisión domiciliaria hasta que la sentencia condenatoria quede firme.

Fuentes con acceso a la causa informaron que el Tribunal desestimó el recurso de impugnación de Rubio por defectos de forma. Aclararon que la presentación se hizo de manera extemporánea.

En consecuencia, el recurso de impugnación no fue declarado admisible en la audiencia que se hizo el lunes por la mañana, aunque la información trascendió en las últimas horas.

Tras la decisión del Tribunal de Impugnación sigue en pie la resolución del juez de garantías Mariano Etcheto, que hizo lugar a principios de enero pasado el pedido del defensor de los imputados Ricardo Mendaña para concederles la prisión domiciliaria a Hernández y Cahuimpan por un plazo de 90 días, porque la sentencia que los condenó a 11 años de prisión como autores responsables del homicidio de Rodolfo Barría aún no está firme.

El fiscal jefe se opuso a conceder el beneficio, junto con el abogado de la querella Guillermo Hensel (concejal del MPN). Los jóvenes deben cumplir con las pautas que dispuso el Tribunal.

Etcheto prohibió a los jóvenes consumir bebidas alcohólicas durante la prisión domiciliaria, no deben tener ningún tipo contacto ni visual ni físico con los familiares de la víctima. Y sólo podrán salir acompañados de un tercero al patio de los domicilios una hora por la mañana y dos horas en la tarde.

Hernández y Cahuimpan fueron condenados a principios de diciembre pasado por el juez Leandro Nieves a 11 años de prisión como autores responsables del homicidio de Barría. 

Los jóvenes fueron condenados luego de que un jurado popular los declarara culpables a principios de octubre pasado.

En el juicio por jurados se estableció que la agresión contra Barría ocurrió la mañana del 9 de abril pasado. Hernández y Cahuimpan atacaron con golpes de puños, patadas y un rodillazo a Barría, y le ocasionaron lesiones en el cuerpo, entre ellas un traumatismo de cráneo, que generó un hematoma subdural agudo en el hemisferio izquierdo de su cabeza, lo que provocó su muerte, luego de una agonía de seis días. Murió el 15 de abril pasado a los 36 años, en el sanatorio HPR de Bariloche.