Los jueces Mariano Borinsky y Gustavo Hornos rechazaron hoy sendos planteos postergatorios del fiscal Javier De Luca y del defensor del ex canciller Héctor Timerman y confirmaron la audiencia del próximo lunes en la Cámara Federal de Casación Penal para discutir la apertura de la denuncia que Alberto Nisman realizara cuatro días antes de aparecer muerto hace casi dos años.

De Luca, quien desistió del recurso que había presentado su colega Germán Moldes porque no está de acuerdo con la apertura a investigación de la denuncia, había alegado que ese día estaría de licencia. Borinsky y Hornos le dijeron que bien puede estar representado el Ministerio Público fiscal por otro colega.

El abogado defensor de Timerman, Alejandro Rúa, había sostenido que la defensa del ex espía Héctor Alan Bogado había sido notificada fuera de término y que correspondía postergar la audiencia. Hornos y Borinsky también rechazaron ese planteo.

"Los fundamentos desarrollados en el escrito en cuestión podrán ser expuestos oralmente durante la audiencia prevista en autos, en reguardo del derecho de defensa constitucionalmente reconocido (art. 18) respecto de Héctor Timerman", señalaron ambos camaristas antes de dejar ratificada la audiencia.

Luego de escuchar a las partes, el próximo lunes, la sala I de la Cámara Federal de Casación, con estos dos integrantes más su única jueza titular, Ana María Figueroa, quedará en condiciones de resolver si abre a investigación la denuncia que se negaron a tomar como causa el juez Daniel Rafecas, en primera instancia, y los camaristas Jorge Ballestero y Eduardo Freiler, de la sala I de la Cámara Federal penal porteña.

Figueroa, quien se especulaba que no acudiría a la audiencia del lunes próximo, participó del acuerdo de hoy pero se excusó de intervenir habida cuenta que Hornos y Borinsky tenían una posición contraria a la suya.

La resolución del tribunal, difundida por el Centro de Información Judicial (CIJ) develó hoy que quien no estará presente en la audiencia será el fiscal De Luca, quien se tomará licencia toda la semana próxima.

Nisman había pedido investigar antes de aparecer muerto si la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner había encubierto a los iraníes que él había acusado por el atentado contra la AMIA a través del Memorándum de Entendimiento firmado por su gobierno con la República Islámica de Irán.