Una gestión que comenzó con un contundente respaldo de la población marplatense, poco a poco se va quedando sin el “crédito” que el pueblo le dio en las urnas. Decisiones desacertadas, donde se mezcla la falta de ideas de algunos de los funcionarios “salientes” y la genialidad de otros de “sacar agua de las piedras”, muestra un Gobierno demasiado unipersonal donde el árbol no le deja ver el bosque. 

El Nico Maiorano más que furioso

Y es en ese escenario donde comienzan a notarse la “falta de códigos” de algunos/as que a la hora de aferrarse al cargo que alcanzaron, no tienen el más mínimo pudor en entregar hasta la madre de ser necesario. También están aquellos que merced al acuerdo conocido como “Cambiemos” arriaron sus banderas en pos de desplazar a quien en ese entonces era el malo de la película: Gustavo Pulti. Entre estos se destaca la figura del siempre laborioso Nicolás Maiorano, que por estas horas estaría intratable. Y no es para menos. Correligionarios que llegaron a cargos en diferentes secretarías, han debido “renunciar” ante la llegada de nuevas autoridades, por lo cual la palabra empeñada por el propio Arroyo allá por octubre, la tiraron al carajo. Hay mucha bronca y la situación está insostenible. Se habla inclusive de un quiebre en el Bloque.

El PRO entre los códigos y los cargos

Por el lado del propio PRO, mas allá que muchos de los que llegaron lo hicieron de la mano de la Fundación Pensar que dirige el silencioso, pero movedizo Juan Aicega, también existe un marcado malestar. No hay que olvidar que si el Carlos Fernando llegó donde llegó, fue por el invalorable aporte de Emiliano Giri, hoy investigado en una causa que deja serias dudas sobre su verdadero sentido de Justicia. Con su partida del Gabinete, comenzaron a “voltearle” muñecos y a desarmar lo poco que había dado resultado en la actual Gestión. Tal el caso de lo realizado en Cultura. Ido Sebastián Puglisi por “cuestiones laborales”, desarticularon en plan de trabajo puesto en marcha y con él se fue además Christian Rabe, otro de los puntales de un área que, con nada, hizo mucho.

¿Salió “Mascherano”, ingresa Alvarito?

Luego del rotundo fracaso de quien soñaba ser el “Mascherano” de Arroyo, el “Toty” Flores al frente de la Secretaría de Desarrollo Productivo del municipio, desde el entorno del ex Zorro 1 comenzaron a pensar en nombres para reemplazarlos y poner en marcha un área vital para Mar del Plata, máxime si se piensa a esta ciudad como una de las “records” en desocupación. El lugar (con la figura de subsecretaría)  soñado por la siempre vigente Vilma Baragiola, sigue stand by,  le habría sido ofrecido al ex precandidato massista, Alvarito Fanproyen. El joven, de raigambre peronista, estaría dispuesto a acceder a la oferta en tanto y en cuanto le den elementos para poder implementar un plan de trabajo que se sostenga en el tiempo, y no sea para remendar situaciones. El gastronómico, conocedor como pocos de la realidad marplatense, tiene un plan e inclusive el apoyo de reconocidas figuras del sindicalismo y la política del mas alto nivel nacional.

Taccone: ¿Nace un nuevo político?

En tanto curan sus “heridas” por la partida de Ariel “Cholito” Ciano de las filas de Acción Marplatense, los integrantes del Partido de la Ciudad entienden que “el proyecto va mas allá de las individualidades”. En tal sentido (luego de desmentirnos que Pablo “El Monje Negro” Fernández se hubiera ido también con Massa), rearman sus acciones futuras, y anticipan que se están preparando “para regresar a los primeros planos” de la política lugareña “y sacar a Mar del Plata del retroceso al que la han llevado Arroyo y Cano en su mesiánica gestión”. Hoy con un Gustavo Pulti “silencioso” y dedicado a solucionar sus temas judiciales, el panorama en AM se abre a nuevas figuras, donde se destacan Santiago Bonifatti y viene creciendo el ex Emder, Horacio Taccone, alguien que se instaló entre la gente merced a una más que satisfactoria gestión al frente de aquel ente deportivo.

El “Cholito” les pateó el tablero

Donde las cosas se han puesto “tirantes” es en las filas del massismo. Allí la figura del siempre pulcro Lucas Fiorini se vió opacada por los trascendidos que ubican al “Cholito” Ciano en la línea de candidateables del ’19 por ese Partido. Hoy los “fiorinistas” analizan que de irse de esa línea política, deberán barajar y dar de nuevo; y de seguir, enfrentar en una “interna” al hijo del Gran Cholo, que no llegó para ser una figura de segundo nivel: el sueña con ser el Intendente de General Pueyrredón, y para ello contaría con el prometido respaldo del propio Sergio Massa, vía Javier Faroni.

La Salud en Terapia Intensiva

A pesar de las buenas intenciones del mediático, Gustavo Blanco, el sistema de salud de Mar del Plata se encuentra en Terapia Intensiva. Al corte del servicio de Neumonologia Adultos, se le sumó la reducción de Atención Clínica en el Cema por mal codificación de los horarios. Sucedió que los profesionales creían que cobraban por 6 horas y les pagaban por 4. Esto se traduzco en 50% menos de turnos al no ampliarle los módulos. ¿Cómo lo solucionan desde Salud?: “contratando” pasantes de la Facultad de Medicina de Fasta… Algo no está funcionando bien.

El stress los enfermó y los internó

La política muchas veces provoca daños colaterales que terminan con sus protagonistas directos e indirectos, stress mediante, en los sanatorios. Tal el caso del nuevamente voluminoso Rodolfo “Manino” Iriart , quien a pesar de haber comenzado a caminar para ponerse en línea, una serie de estudios que se realizara no le dio todo lo positivo que esperaba. Así es como un alto nivel de azúcar en sangre e hígado graso, hizo que se prendieran todas las luces de alerta y terminara “internándose” en Puígari (Entre Rios) para equilibrar su descontrolada situación física. Otro que no la está pasando nada bien es el empresario Roberto Fiocca, quien es señalado como “partícipe” del caso del Astillero Río Santiago. El publicista sufrió un infarto y debió ser internado de urgencia en el Sanatorio “La Trinidad” donde se recupera lentamente. O bajan un cambio, o todo puede terminar mal.