Nunca le perdonó su pase al Frente Renovador. Desde que Adrián Pérez abandonó la Coalición Cívica para sumarse a las huestes de Sergio Massa, Elisa Carrió no le pierde pisada. Aprovecha todas las oportunidades para pasarle factura por su abandono y ahora mandó a sus dirigentes a competirle en Vicente López, donde su ex ladero político acaba de lanzar su candidatura a intendente.Ni un solo día de respiro le garantizó Lilita. El viernes 26 de diciembre Pérez recibió en Vicente López a Massa, en un encuentro del que participaron también otros ex dirigentes de la Coalición Cívica que siguieron al diputado en su camino hacia el Frente Renovador. Menos de 24 horas después, la Coalición Cívica reabría su Casa en Vicente López y anunciaba la presentación de una lista propia para competir en el distrito, con todos sus cañones exclusivamente dirigidos hacia el ex lilito.“Adrián Pérez se fue por un cargo, es el Borotocó más joven de la política argentina”, disparó  el presidente de la Coalición Cívica de Vicente López, Javier Capuano, durante la reapertura del local. Durante un acto en el que estuvo acompañado por la candidata a diputada nacional Marcela Campagnoli – hermana del fiscal José Campagnoli – el dirigente se dedicó a pegarle Pérez y a los otros ex dirigentes de la Coalición Cívica que se pasaron al Frente Renovador, a quienes calificó como “una cumbre de incoherentes”. Además, Capuano anunció que Carrió visitará personalmente el distrito en el mes de marzo.Desde que comenzó a correr el rumor de que Pérez pensaba presentarse como candidato en Vicente López, la Coalición Cívica local buscó la manera de frenarle el paso. En octubre, el partido  emitió un comunicado diciendo que su ex candidato a vicepresidente no podía competir por la intendencia del distrito por no contar, supuestamente, con el año de residencia que se requiere para ese fin e intentando confinarlo a su ciudad natal, Azul. Sin embargo, Pérez fijó domicilio en Olivos en enero de 2014, por lo que ya está próximo a cumplir con el requisito legal exigido para ser candidato. El diputado apuesta a que el aplastante triunfo que obtuvo Massa en Vicente López en 2013 – cuando cosechó el 49 por ciento de los votos – le sirva de impulso en su carrera hacia la intendencia. Desde su sector aseguran que Lilita busca desplazarlo del distrito para favorecer al intendente Jorge Macri, en el marco de su acercamiento al Pro.La relación entre Carrió y Pérez se terminó de quebrar tras las elecciones de 2011, cuando la líder de la Coalición Cívica dejó solo al diputado en la conferencia de prensa posterior a que se conocieran los resultados de los comicios primarios. El año en que Cristina Fernández de Kirchner obtenía un arrasador 54 por ciento de los votos, la fórmula integrada por Carrió y su ex protegido político, Pérez, apenas alcanzaba un 3,22 por ciento en las primarias y 1,82 en las generales.  Y aunque el viejo axioma marino dice que el capitán siempre debe ser el último en abandonar el barco, aquel domingo 14 de agosto, Carrió no estuvo presente para hacerle frente a los medios. “Destrozada” por los resultados, abandonó a su suerte a su candidato a vicepresidente y lo mandó a explicar la derrota en soledad. “No ha sido una buena elección de la Coalición Cívica”, admitió Pérez ante la prensa. No hubo mucho más para agregar.Tras el naufragio de 2011,  Pérez fue elegido secretario general de la Coalición Cívica y quedó a cargo de la conducción. El hombre de Azul entendió desde ese mismo momento que Lilita le oponía resistencia: los congresales de Chaco, la provincia de Carrió, votaron en contra de la elección del ex candidato a vicepresidente como cabeza del partido. El diálogo con la dirigente, con la que trabajaba desde mediados de los ’90,  estaba cortado.Dos años después, Pérez negociaba su pase el Frente Amplio Progresista (FAP) cuando recibió una sorpresiva oferta de Massa, a quien conocía de los grupos de jóvenes dirigentes y de la Fundación Red de Acción Política (RAP). La propuesta del ex intendente de Tigre sedujo a Pérez, seguro de que en el Frente Renovador tenía muchas menos chances de cruzarse con Carrió que en el FAP. El día del cierre de listas de 2013, dio la sorpresa al anunciar su pase. En el Frente Renovador, dice, Massa le dio vía libre para trabajar en los temas que más domina, la lucha contra la corrupción y la transparencia.Tiempo después, detrás de Pérez pasaron al massimo, desde la Coalición Cívica, Walter Martello, ex titular del bloque de diputados bonaerenses y ex titular del partido a nivel provincial, los ex diputados nacionales Juan Carlos Vega y Fernanda Gil Lozano, los ex legisladores provinciales María Isabel Gainza, Pedro Simonini y Adriana de la Cruz y varios ex concejales.Pérez había crecido bajo su ala. Lilita no lo perdonó. “Que Dios lo perdone”, le dedicó durante la campaña 2013. “Ahí está el joven que me arrancó todo”, dijo un año después, al cruzarse con el diputado durante una entrevista en un estudio de TN.  “No existe ninguna explicación moral posible para que Adrián Pérez esté con esos delincuentes”, volvió a recriminarle durante una recorrida por Azul, además de tirarle por elevación cada vez que vincula a Massa al narcotráfico.En honor a su vieja relación, el diputado nunca le respondió. Pese a que la cruzó varias veces en el Congreso no volvió a hablar con ella aunque alguna vez, desprevenida, la sorprendió con un saludo en un pasillo. Carrió no aflojó. En dos meses desembarcará en Vicente López exclusivamente para disparar contra su hijo político.