En diálogo con El Eco de Tandil, Carrillo manifestó que comenzaron a darse una serie de debates desde la militancia cotidiana pero para que estén en la superficie política local, se requiere de una representación física ya que “es difícil darla desde la periferia de la política”. Así fue que desde el año pasado comenzaron a dar la pelea desde un ámbito más desde la instalación de los compañeros junto a Micaela Herrera y este año se definió que Nicolás sea quien promueva las ideas de la fuerza.

Carrillo indicó que como la mayoría de los espacios políticos del peronismo cuentan con aspiraciones que son legítimas pero que todavía queda un mes de conversaciones. “Somos parte de un proyecto colectivo pero en la democracia se votan nombres, puede parecer contradictorio pero en estos 10 años que vengo militando eso lo sabemos y creemos que estamos en condiciones de tener una representación política en la ciudad”, agregó.

Por otro lado manifestó que el objetivo es ocupar un lugar institucional en el Municipio de Tandil. Sin embargo el Frente Para la Victoria todavía tiene que decidir muchas cosas ya que falta y habrá que ver si se armará una o dos listas. “Nosotros somos un espacio político con autonomía que somos parte de la conducción de Diego Bossio”, detalló.

Al mismo tiempo, en los últimos meses el espacio creció mucho con las ideas que viene planteando Jorge Taiana, quien días atrás se bajó de su precandidatura a presidente, y en Tandil hay algunas cuestiones importantes como es el trabajo, la producción, el acceso al suelo, la seguridad. De esa forma es que proponen pensar en esas temáticas con cabezas del siglo XXI.

Eso sumado a que en los barrios no hay interlocutores a mano y siempre hay dudas sobre las cloacas, el gas, las luminarias, los baldíos, entre otros temas. Por lo tanto, “el nuestro es un espacio donde nos movemos muchos y por eso creamos el slogan -La hora de los barrios- que tiene que ver con darle representación a todas esas representaciones de lo cotidiano”, manifestó Carrillo.

 

Suelo urbano y trabajo

 

Una de las problemáticas que el espacio viene trabajando desde hace tiempo es el acceso al suelo. Para eso existe una ley de la Provincia que es muy positiva aunque el Municipio todavía no adhirió; por lo que creen que hay una ausencia en la intervención del Estado en la ciudad de Tandil y hay un serio conflicto con el acceso al suelo.

Carrillo especificó que en los barrios hay mucha informalidad ya que los vecinos no cuentan con las escritura de sus propiedades. A tal punto que, por ejemplo, se realizó en Villa Aguirre un informe de trabajadoras sociales que da cuenta que el 70 por ciento de los vecinos no cuentan con la escritura. Estos vecinos no pueden acceder a mejoras habitacionales porque no tienen la titularidad de la vivienda, por lo tanto tampoco pueden acceder a programas o créditos para mejorarla o arreglarla cuando existen leyes que contemplan esa situación y que no se dan a conocer. Lo mismo sucede con el acceso a los servicios porque esas viviendas que no tienen la escritura, tienen problemas para conectar el gas, agua, etc.

Por otro lado, con respecto al trabajo en la ciudad, el último censo fue del 2010. Según explicó el representante del Movimiento Evita existe un convenio de la Provincia con las ciudades mayores a 50 mil habitantes donde todos los años se hacen encuestas sobre la situación del empleo y “Tandil desde el 2010 no tiene censo porque el Municipio no firmó convenios para avanzar en ese sentido”. En ese momento los resultados arrojaron que el 35 por ciento de los trabajadores estaban en situación de informalidad, el 10 por ciento con desocupación y el 20 en subocupación.

Por lo tanto una de las propuestas con las que quieren trabajar desde este espacio es la idea de pensar con una cabeza del siglo XXI donde existen nuevas formas de trabajo como es la Economía Social y las cooperativas como sucede por ejemplo con las fábricas recuperadas.

 

Seguridad

 

Por otro lado, Carrillo expresó que la seguridad se da en todos los sectores sociales pero en los barrios humildes es un denominador común que exista el delito predatorio. La Provincia avanzó con la policía comunal y “nosotros lo vemos muy bien” porque es de proximidad y prevención del delito; pero la ley perdió su espíritu original a través de la cual los intendentes y concejales iban a poder controlar a esa policía porque son ellos quienes conocen los delitos de los barrios de Tandil. Sin embargo con las trabas que puso el Frente Renovador, salió como un anexo de la bonaerense y en ese sentido es que están trabajando en un proyecto de seguimiento de la policía.

El objetivo es que Tandil genere una herramienta desde el Estado para que haya un control y seguimiento de la policía que va a implicar un resguardo de los trabajadores pero también observar cómo funciona esa policía, poder armar protocolos contra violencia de género, doméstica, institucional, entre otras cosas. Les parece importante dar este paso de seguridad ciudadana porque ya que es un problema muy profundo como para dejarlo sólo en manos de la policía como un ente autogobernado sino que tiene que haber control y ayuda de la ciudadanía.

“No olvidemos que dentro en poco tiempo tendremos a estos efectivos en la calle y no alcanza una capacitación de 6 meses sino que el Estado municipal tiene que meterse a planificar complementos en distintos ejes”, concluyó Nicolás Carrillo.