En aquel entonces, Randazzo había indicado que en seis meses se iba a realizar un trayecto que conducía de la en Avenida Champagnat y 9 de Julio a Chile y 25 de Mayo. Para la oportunidad, esas ocho cuadras iban a costar 22 millones de pesos.

Sin embargo, las tareas duraron escasas semanas, se realizaron pequeños tramos y algunos de ellos mal diseñados. Debido a una mala planificación y ejecución, se debió romper parte del asfalto colocado para no irrumpir con el trayecto del tren hacía la terminal local.

En el mismo momento de la cancelación de las obras se abrió polémica acerca del destino de los fondos de Nación para este emprendimiento. En diálogo con Radio Mitre, el titular del Emvial, Pablo Simoni, dijo días atrás que “sobre la segunda etapa no hay noticias sobre la llegada de fondos. Hay que esperar un tiempo. Los fondos que habían sido enviados solo llegó una parte, el resto no se sabe dónde están. Están en materia de investigación”.

“La primera etapa demandaba 11 millones de pesos y sólo se enviaron cuatro millones. Tenemos un déficit de cuatro millones de pesos. Para nosotros son montos muy importantes”, destacó el funcionario sobre las presuntas irregularidades en la gestión municipal anterior.

Sobre las fallas ya descriptas, Simoni recordó: “La obra se había iniciado con una traza que era más ancha que la actual. Se tuvo que cortar porque hubo planteos de Ferrobaires”.

En el marco de la apertura de la esquina 9 de Julio y Juncal, el vicepresidente del Emvial, Mariano Bowden, también hizo referencia al carril, que se encontraba a metros de la recorrida del funcionario realizada este martes: “Esa obra está parada pero todo lo que se desarrolla es en base a una misma línea de trabajo”.

“Para el día de mañana se puede continuar esa obra y esto (por la apertura de calle) contribuye a ese carril”, resaltó a El Marplatense Bowden, quien aclaró que la vuelta de los trabajos “depende de la llegada de fondos”. “El carril queda sin ejecutar pero es parte del plan”, cerró.