“A la luz de nuestro texto constitucional provincial y de acuerdo a la opinión jurídica de expertos en la materia, es la modificación de la ley de partidos políticos (5.454) la posibilidad cierta para establecer una mayor rigurosidad en los requisitos para la constitución de los partidos políticos”. Así lo expresó a LA GACETA la secretaria de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, al referirse al proceso de reforma política que diagramó el Poder Ejecutivo.

“A un año del proceso electoral provincial, desde el Gobierno hemos avanzado hacia una reforma política que contemple todos los aspectos que integran dicho concepto, del cual uno es el proceso electoral”, acotó en ese sentido.

La funcionaria remarcó que la participación ciudadana en la iniciativa “Tucumán Dialoga” puso en evidencia que existen “personas e instituciones que pueden aportar ideas para enriquecer este debate y que necesariamente la búsqueda del consenso debe ser el espíritu que anime a todos los sectores para discutir seriamente esta cuestión”.

En relación con eventuales modificaciones a la ley 5.454, indicó que también deben incorporársele mayores exigencias de información pública respecto de los partidos, sus autoridades y afiliados, exigencias de mayor representatividad de los partidos y la creación de una dirección de estadísticas en el ámbito de la junta electoral.

Sostuvo que el debate por la reforma en Tucumán se está trabajando a nivel gubernamental y que “esta madurando en el debate interno que necesariamente deben tener los partidos políticos y las instituciones de Tucumán”.

Con reservas

Vargas Aignasse opinó que la reforma a nivel nacional, “que se basa principalmente en la modificación del instrumento de votación (voto electrónico), hoy en discusión parlamentaria, en caso de aprobarse, establecerá algunos parámetros nacionales”, aunque advirtió que las provincias se reservan esta competencia y los tiempos para gestar una reforma como esta. “Estarán marcados por el proceso de diálogos y de acuerdos a los que seamos capaces los tucumanos de arribar”, precisó.

En ese marco, señaló que la Legislatura está siendo respetuosa de la participación ciudadana, comprometida en el material que recibieron y en las propuestas que las instituciones participantes elaboraron y le hicieron llegar.

Contra la ansiedad

“Si queremos una reforma política que perdure en el tiempo, esta no puede ser tomada como el bastión de campaña de ningún sector. Las leyes se dictan para solucionar los problemas de la gente, no para calmar la ansiedad de ningún dirigente. Los tucumanos nos merecemos una discusión despojada de intereses partidarios o personales”, dijo.

En ese sentido, la secretaria de Gobierno señaló que un sistema electoral siempre es perfectible. “Las modificaciones que se introduzcan en materia de regulación de la oferta electoral, de controles sobre los partidos y de transparencia en el funcionamiento de los mismos, siempre deben tener como objetivo lograr mayores niveles de equidad electoral”. Una reforma política -prosiguió- no sólo debe garantizar el óptimo funcionamiento de los comicios sino que, además, debe propender al fortalecimiento de los partidos políticos más allá de la competencia electoral.

“Hay que entender que los partidos son el espacio natural de participación política de una sociedad y que los mismos deben aspirar a expresar y materializar las demandas del conjunto de la ciudadanía, sólo así se podrán garantizar mayores niveles de representatividad y por consiguiente, un permanente fortalecimiento del sistema democrático”, finalizó.