Luego, se designó en esos cargos a dirigentes del PJ oficial. El acuerdo Tere Madera, Ariel Puy Soria, Ricardo Quintela y Gustavo Luna fue clave en esta nueva avanzada política del bederismo al paredismo.

El paredismo sufrió un duro revés político en el Concejo Deliberante. Es que literalmente el PJ capitalino dominado por el bederismo le arrebató tres cargos claves en la estructura del recinto Tomás Moro.

En ese contexto, los concejales Raúl Larraín, Warren Córdoba, Duilio Madera, Alcira Brizuela, Carlos Machicote, Lucas Adaro, Gabriela Amoroso y Gonzalo Brizuela votaron por la destitución del prosecretario Deliberativo, Mauricio Molina, el Prosecretario Administrativo, Roberto Orellana y el Secretario Deliberativo, Matías Juárez.

Luego, nombraron dirigentes afines al bederismo, más precisamente al quintelista y acérrimo enemigo político del paredismo, Ramón Vera, como Secretario Deliberativo, al lunista Gerardo Leguizamón como Prosecretario y a Enrique Molina como Prosecretario Administrativo.

De esta forma, además de tener mayoría en el Concejo Deliberante, los dirigentes que responden al PJ que comandan Sergio Casas y Luis Beder Herrera le da otro duro golpe político al espacio del intendente Paredes Urquiza y Felipe Alvarez.

Recordemos que ya le sacó el control del transporte urbano en Capital y anuló el Tribunal de Cuentas Municipal, que fue absorbido por el entre de contralor provincial.

Todo esto se pudo lograr también gracias al acuerdo político de los dirigentes Tere Madera, Ariel Puy Soria, Ricardo Quintela y Gustavo Luna, quienes están trabajando políticamente juntos en Capital con el objetivo de pelearle en 2019 la intendencia al paredismo e incluso poner algunos de ellos en la fórmula gobernador-vice.

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