El inminente inicio del ciclo lectivo nos recuerda que es hora de ir comprando los útiles que necesitarán los chicos. Lo cual suele ser un dolor inevitable para el bolsillo, que se multiplica según la cantidad de hijos escolarizados que se tenga.

 

En fin, durante el fin de semana recorrimos algunas librerías comerciales del micro centro, donde el factor común fue el número 40. Es que los responsables de los comercios aseguran que –según el producto- los precios de hoy vienen con un incremento de hasta un 40 por ciento en la comparación interanual.

“Yo hice un análisis de diferencia de costos en relación a 2014 porque, mucho más que las opiniones, los números reflejan la realidad”, explica Sandra Silicani, de librería Grafft.” Un familiar Rivadavia aumentó un 36 por ciento entre enero de 2014 y el mismo mes de 2015. En cambio, un cuaderno de licencia viene con un incremento de 25 por ciento. Y una mochila de carro, importada, en la misma marca viene con un 39 por ciento de incremento”, agregó Sandra.

 

Opciones

Si bien el aumento es pesado en lo porcentual, también es una realidad que los negocios ofrecen diferentes opciones. Por ejemplo, nos encontramos con que las carpetas de primera marca –y con el estampado de moda- tienen un costo de 45 pesos. La misma carpeta pero de modelo anterior cuesta 15 pesos, es decir, un 200 por ciento menos. Y, en algunos locales, también se consiguen 2 por 25 pesos. “La canasta escolar la arma cada uno, según su propio bolsillo. La ventaja en este rubro es que, al haber una oferta tan grande, la gente puede elegir. Y hay que estar atentos a las promociones. Por ejemplo, los productos de escritura marca Fabber aumentaron un 35 por ciento, pero en febrero vienen con un 20 por ciento de descuento”, cuenta la titular de Grafft.

Los comerciantes coinciden en que el aumento es progresivo. Es decir, no se produce a poco del regreso de los chicos a las aulas sino que se viene dando de manera sostenida, mes a mes.

 

Anticipación

Desde principios de febrero, el movimiento en las librerías comerciales del micro centro parece ser interesante. “Mucha gente se anticipa a hacer las compras durante la primera quincena de febrero, para evitar el caos que se produce más cerca de marzo. Lo bueno es que en enero se vendió muy bien. Y en febrero se viene sosteniendo el nivel de ventas”, cuenta Sandra Silicani.

Es difícil estimar un valor promedio de la canasta escolar, puesto que no todas las escuelas piden lo mismo. Y porque, obviamente, el pedido difiere de un nivel a otro, es decir, Inicial, Primario y Secundario.

Con todos estos datos, la clave –a modo de consejo- es tomarse un tiempo y armar el combo que mejor le siente al bolsillo de cada uno. En definitiva, hay precios y marcas para todas las necesidades.