José María Campagnoli terminó la primera audiencia pública de su juicio político con la esperanza de que su situación, que días atrás parecía condenada, puede tener un resultado favorable. "Me di cuenta de lo endeble de la acusación y creo que vamos a poder revertir esto", dijo al hablar con la puerta al dejar el edificio del Ministerio Público, en Avenida de Mayo 760.

"Seguimos sosteniendo que la acusación no tiene sustancia. Yo tengo mucha confianza en el trabajo de mis abogados. Y confío en que podemos tener un veredicto muy favorable", dijo.

La procuradora general, Alejandra Gils Carbó, fue quien solicitó el enjuiciamiento y la suspensión de Campagnoli, quien había comenzado una investigación de oficio al empresario Lázaro Báez tras la transmisión del programaPeriodismo para Todos de Jorge Lanata en el que aparecieron por primera vez Leonardo Fariña y Federico Elaskar.

En su acusación, Gils Carbó dijo que Campagnoli avanzó con la investigación abusando de su poder e invadiendo la competencia de otro fiscal, aun sabiendo que no le correspondía y "poniendo en serio peligro el avance de la persecución penal". Por ello, impulsó el juicio contra el fiscal, suspendido por el Tribunal de Enjuiciamiento. La decisión fue señalada por la oposición como un movimiento para amedrentar a otros fiscales que investigan casos de corrupción.

Primer round

La primera hora del jury sirvió para que se conozca en detalle la acusación de Gils Carbó. El planteo estaba contenido en 36 páginas.

El abogado Gil Lavedra consideró que la acusación peca de "imprecisiones" impropias para el trabajo de una procuradora. También dijo advertir "intencionalidad" en los argumentos expuestos. "No es objetivo, tiene hechos falsos, las cosas no son como dice el escrito", indicó el letrado a un cronista de Infobae durante el receso.

Lo inesperado de la jornada llegó cuando los fiscales que llevan adelante la acusación contra Campagnoli,Marcelo García Berro (San Martín) y Adolfo Raúl Villate (Rosario), pidieron que se permita llamar a declarar a vecinos de Saavedra, que supuestamente se vieron afectados por el fiscal cuando exhibía fotografías suyas -que éstos desconocían- para inducir a víctimas de delitos a reconocer a los responsables.

Gil Lavedra criticó la propuesta al considerar que "viola el derecho a la defensa" del acusado. Más tarde, el tribunal rechazó el planteo.

Entre los testigos que declararon está el director de Migraciones, Martín Arias Duval, y Jorge Chueco, el abogado que firmó en nombre de Helvetic firmó cheques millonarios de la ruta del dinero que investigó el fiscal.

Chueco admitió que conoce al empresario Lázaro Báez y que participó en la venta de la financiera SGI ("La Rosadita"), operación en la que su titular, Federico Elaskar, denunció haber sido extorsionado.

A lo largo de la jornada, hubo múltiples cruces entre la fiscalía y la defensa. Los primeros intentaron marcar supuestos excesos de competencias y abuso de autoridad, mientras que los abogados de Campagnoli observaron que los testigos no tienen demasiada constancia de algunos de los puntos que denuncian.

Más tarde declararon Juan Martín Cagni Fazzio, abogado de Chueco; Lorena Vanesa Totino, abogada de Edgardo Levita, y la escribana Mercedes Salcedo. Para el jueves quedaron postergados los testimonios de Juan José Taboada Areu, secretario de la fiscalía 10; y Vanesa Varela.

En tanto, la declaración escrita del fiscal Guillermo Marijuán fue entregadas a las partes pero no se leyó durante la audiencia. El resto se leerá luego de que declaren todos los testigos.

El proceso

Desde el martes declararán ante el tribunal los testigos de la defensa: los periodista Jorge Lanata, Nicolás Wiñazky y Daniel Santoro; los jueces Luis Cabral y Ricardo Recondo, así como los legisladores opositores Graciela Ocaña y Manuel Garrido. La ronda de testigos se extenderá hasta el jueves.

Para Gil Lavedra, el juicio contra Campagnoli "simboliza la lucha por la independencia funcional del Ministerio Público". "Está en juego si tendremos o no fiscales activos, que no miren para otro lado en materia de corrupción", agregó.

El ex diputado radical, quien opinó que se trata de una imputación absurda, se mostró confiado en que su defendido quedará absuelto. La defensa espera que la representante de la Defensoría, María Cristina Martínez Córdoba, quien apoyó la suspensión de Campagnoli, ahora no vote por su remoción.

En tanto, a través de las redes sociales se convocó a una movilización en apoyo a Campagnoli para el miércoles a las 19 frente a la Procuración, donde será juzgado el fiscal, ubicada en Avenida de Mayo 760.