Se trata de un "cambio quirúrgico" y no responde a "una modificación masiva" del rumbo del Gobierno. Con estas precisiones dignas de un médico, en la Casa Rosada evaluaron hoy el recambio de dos ministros que impuso el presidente Mauricio Macri en las últimas horas.

La decisión del jefe del Estado de remover al ministro de Agricultura Ricardo Buryaile para poner a Luis Miguel Etchevehere y sacar al ministro de Salud Jorge Lemus por Adolfo Rubinstein no tiene nada que ver con un recambio generalizado de la cara del Gobierno. "Sólo se trata de dos cambios quirúrgicos. No es nada masivo", reflexionó ante Infobae un destacado funcionario de la Casa rosada.

En coincidencia con esta evaluación, un ministro que dialoga con Macri asiduamente admitió que Lemus estaba "fuera de la órbita y del ritmo" que el jefe de Estado quiere imponerle a su administración. En el caso de Buryaile, su remoción fue muy sorpresiva. Ni siquiera allegados al Presidente esperaban ese pedido de renuncia. Es que hasta hace unos días, el ministro de Agricultura se encontraba muy activo y dispuesto a avanzar con el plan de reformas que anunció Macri ayer en el Centro Cultural Kirchner. No sólo esto: el sábado pasado  había regresado de Costa Rica donde viajó para impulsar la designación de Manuel Otero, un argentino que fue elegido director general del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). En este caso, Buryaile hizo un fuerte lobby para posicionar a la Argentina y a Otero en ese organismo internacional. Pero la respuesta de Macri ante ese trabajo diplomático no parece haber sido la palabra esperada por el ministro de Agricultura.

Según supo Infobae, fue el jefe de Gabinete Marcos Peña quien esta mañana le informó a Buryaile sobre su remoción. Lo mismo hizo el jefe de ministros anoche con Lemus.

"Buryaile viene haciendo un gran trabajo pero el desgaste en la función pública es muy fuerte y además Macri quiere darle un nuevo impulso a Agricultura", expresó a Infobae un funcionario del gobierno. Ajeno a esta opinión, un secretario de Estado que conoce bien a Macri desde el gobierno porteño acotó: "Las remociones pedidas por el Presidente responden a que los funcionarios no estaban funcionando en forma óptima".

Al parecer, la decisión de poner a Etchevehere como ministro de Agricultura responde a una decisión de Macri de dar una señal fuerte al campo y a la vez un guiño al radicalismo. Es que el próximo ministro es un hombre de tradición radical y un claro referente de la Sociedad Rural. En la Casa Rosada admiten que la designación de este nuevo ministro de Agricultura fue resistida por algunos funcionarios cercanos a Macri ya que podría generar cierto malestar en algunos sectores del campo alejados de la tradicional aristocracia ganadera. Pero aseguran que el Presidente prefirió guiarse por su intuición y no por los consejeros.

Las fuentes de la Casa Rosada consultadas por Infobae admiten que en el caso de Lemus,su renuncia era "esperada" ya que el Ministerio de Salud no estaba funcionando al ritmo que Macri quería y se mantenía ajeno a las decisions del Presidente. ¿Seguirán los cambios en el gabinete? Hoy se mencionaba en el Gobierno que el próximo en ser removido sería el ministro de Medio Ambiente, el rabino Sergio Bergman.

Sin embargo, en la Casa Rosada aseguraron que los cambios en el gabinete no seguirán, al menos por ahora. Así lo hizo saber un funcionario cercano al jefe de Gabinete Marcos Peña. Desde esta lógica es que se inscribe la idea de que la salida de Buryaile y de Lemus fueron remociones "quirúrgicas", puntuales y bien focalizadas. Más bien, estas renuncias pedidas responden a casos puntuales y no seguirán. Después de todo, evalúan en el Gobierno, ante un gabinete con 22 ministerios, los dos recambios recientes son apenas una modificación mínima para el jefe de Estado.

En el caso de Buryaile la designación oficial no se hará hasta que el Presidente regrese a mitad de la semana que viene de Nueva York. Es que Macri tiene previsto viajar el domingo a Estados Unidos para mantener reuniones con inversores norteamericanos en Wall Street y promover allí a la Argentina.