El cacerolazo ya tiene su relato K

Bastó menos de una semana para que el masivo cacerolazo del jueves pasado, con epicentro en la Ciudad de Buenos Aires pero repliques en todo el país, ya tenga su relato oficial. Un recorte que se fue armando en cuestión de días y a través distintos intérpretes, con una coincidencia: descalificar a quiénes hicieron el reclamo y minimizar su impacto.
Si algún aterrizado quiere saber cómo fue el cacerolazo sin tomarse el tiempo de ver fotos, videos o leer algunos diarios de la época, esta es versión K de la historia, basada en los testimonios de funcionarios, legisladores y otros. Creer o desconfiar.

¿El cacerolazo en la Ciudad convocó a más de 100.000 personas? No. "En Plaza de Mayo no hubo más de 20.000 personas" (senador Aníbal Fernández). "No hubo más de 10.000 personas. En los 90 marchábamos desde Laferrere, hoy marchan desde Santa Fe y Callao. Fracaso total de Clarín y la oposición" (piquetero Luis D'Elía).

¿Fue una convocatoria espontánea a través de las redes sociales? Tampoco. "El Grupo Clarín fue el principal gestor de este movimiento. Todo fue armado por profesionales con identidad falsa (otra vez Aníbal F.). "No es cierto que haya sido espontánea. En el camino a Plaza de Mayo había camionetas que acompañaban la marcha" (jefe de bloque K, Agustín Rossi). "En la Argentina no hay nada que sea improvisado o espontáneo, esto tuvo una logística, una organización y una preparación (jefe del bloque K en el Senado Miguel Pichetto).

¿Fue un reclamo de gente diversa, con derecho a protestar? Menos aún. "Son los que en otros tiempos recurrían a golpes militares. No pisan el pasto para no ensuciarse. Les preocupa más lo que pasa en Miami que en San Juan (jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina). "Sólo reflejan el odio y la impotencia de un sector con reinvindicaciones tan inconfesables que no encuentran quién los represente" (ministro de Planificación Julio De Vido). "Era gente de clase media-alta, bien vestidos; digo porque los que se manifestan a veces son gente muy oprimida en el nivel económico" (Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo). "Ellos son la clase que nos humilla diciéndonos 'negros de mierda', los que estaban felices cuando entraron a nuestras casas para secuestrar y torturar hasta la muerte. Nos dan asco" (titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini).

¿Y si vuelven a protestar? Guarda. "La Plaza de Mayo no es de la señora que lleva a la mucama para que golpee la cacerola. Nosotros sabemos tomar la calle" (secretario de Cultura Jorge Coscia).

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