Buscan que Full Night cierre para siempre

Buscan que Full Night cierre para siempre

La Municipalidad irá a la Justicia para levantar el amparo que impide el cierre del bar ex Rapoza, donde ayer agredieron a periodistas de El Doce.

 

El bar Full Nigth, que funciona como after clandestino (ya que los boliches, shows y la venta de alcohol están prohibidos en la ciudad por ordenanza a partir de las 5), todavía mantiene sus puertas abiertas por un amparo presentado en la Justicia tras el intento fallido de la Muni de clausurarlo la semana pasada luego de un accidente frente a sus puertas y que terminó con la vida de una joven de 24 años que salió del bar con su vehículo a contramano.

José Fernández, secretario de Seguridad y Convivencia ciudadana de la Muni, indicó que hoy presentarán en la Justicia todos los antecedentes de clausuras y violaciones de clausuras que tiene el bar para destrabar el amparo que impide la revocatoria de la habilitación que tiene el local. 

“Ese lugar no puede funcionar más porque viola todas ordenanzas vigentes. Tiene habilitación de bar, puede estar abierto las 24 horas, pero de ninguna manera puede vender alcohol después de las 5 o hacer shows en vivo. Si destrabamos el amparo ahí no va a funcionar más nada”, aseguró el funcionario. 

Periodistas agredidos

Full Nigth, ex Rapoza, funcionó todo el fin de semana gracias al amparo presentado en la Justicia que inhabilitó a la Municipalidad para la clausura. Para reflejar esto, un equipo de Canal Doce, integrado por el periodista Sebastián Pfaffen y el camarógrafo Wernher Martínez, trabajaba en el lugar ayer por la mañana cuando fue agredido por personas de ese local que comenzaron a increparlos y luego intentaron golpear a Martínez. 

Además, les abrieron las puertas del móvil del canal y quisieron quitar la llave del vehículo. 

“Nosotros, para no molestar, estábamos desde la vereda opuesta. Este hombre viene corriendo, lanza una trompada al camarógrafo Wernher Martínez que se corre. Una persona que pasaba se metió a ayudar. Y después otra persona (...) que no venía a ayudar se paró detrás del auto dándole más fuerza a los gritos de este hombre, que se quiso llevar las llaves del móvil”, relató Pfaffen en el noticiero Arriba Córdoba. 

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