Formalmente la empresa que compró las tierras es Cerezas Argentinas SA y forma parte de Extra Berries que tiene producción de arándanos en Salta. Ya tenía otros campos en el Valle Medio. La noticia fue confirmada por el comisionado de Fomento de Chelforó, Adrián Lamela, quien informó a la agencia APP que gran parte de esas tierras son vírgenes y en un 30 ó 40% “es apta para la producción, es tierra productiva”.

Hay que recordar que actualmente Chelforó es una pequeña localidad con no más de 70 personas, puerta de ingreso al Valle Medio desde el Alto Valle, que llegó a tener décadas atrás hasta unos 800 habitantes cuando era punta de riel y distribuía parte de la fruta y el cuero que se producía en la región.

Después decreció, especialmente en los ’90 con la privatización de Ferrocarriles Argentinos y también con gas del estado, porque en Chelforó había una planta de bombeo con bastante mano de obra.

Aunque las tierras que la rodean son muy productivas, hay una casi nula actividad porque los propietarios la han dejado virgen, sin explotar, o a la sumo utilizándolas para el pastoreo.

Lamela indicó que “hasta 15 kilómetros hacia el este de la localidad empiezan a verse los cultivos de empresa grandes como Expofrut y la misma empresa Cerezas Argentinas que es el grupo que compra las 20 mil hectáreas, es decir, no es el único campo que tienen en la zona.

Recordó a la agencia APP que el área de Chelforó se ha dedicado al pastoreoo “pero esto no genera mucha mano de obra ni desarrollo urbano”.

Los pobladores del lugar sólo en algunos casos tienen un trabajo, algunos en alguna chacra, un par en Cerezas Argentinas, otros en algún comercio sobre la ruta 22, pero en general “no hay fuentes genuinas de trabajo, y de los que están varios son jubilados y pensionados”. “Hay poca gente joven”, sentenció.

Explicó que la compra de 20 mil hectáreas por parte de los empresarios Bulgheroni todavía no ha generado en la gente del pueblo ninguna expectativa.

Informó que Bulgheroni compró estas tierras a los herederos del coronel José Ignacio Garmendia quien participó de la primera parte de la Campaña del Desierto, que también fue un artista y diplomático argentino.

Sobre cómo está funcionando la Comisión de Fomento, explicó que “dentro de lo posible lo estamos manejando bien, con lo que recibimos brindamos algunos servicios a la comunidad, y cuando no alcanza gestionamos aportes; la semana pasada recibimos en Viedma un aporte de 99 mil pesos destinado a realizar obras de conexión domiciliaria de gas”.

Finalmente indicó que personalmente tiene expectativas que Bulgheroni ponga a producir las tierras compras como hizo con otros campos a través de Cerezas Argentinas, “o que el gobierno tome las medidas necesarias que impulse a esta gente a producir las tierras o deshacerse de las mismas para que venga alguien que realmente quiera trabajarlas”.