Hebe de Bonafini defendió una vez más al nuevo jefe del Ejército César Milani, al que entrevistó hace dos semanas en la sede de las Madres de Plaza de Mayo, cuando ya estaba convencida que su pliego pasaba por el Senado. Durante la ronda de los jueves, la titular de las Madres criticó al periodista Horacio Verbitsky, titular del Centro de Estudios Legales y Técnicos (CELS), la ONG que impugnó con más fuerza el pliego de Milani. Sin nombrarlo, dijo que ya se había equivocado cuando dijo que "no había que nombrarlo a Bergoglio como Papa porque había secuestrado algunos sacerdotes".

La postulación y posterior votación de Milani dejó expuesta otra vez la interna en el seno de los organismos de derechos humanos durante la era kirchnerista, que ya se expresó en otros temas como el destino de la ex ESMA o los actos del 24 de marzo.

Con Verbitsky, otro aliado incondicional del Gobierno, ya había tenido un cruce picante luego del ataque contra las Torres Gemelas. En aquel momento lo trató de "sirviente de Estados Unidos. Recibe un sueldo de la Fundación Ford y, además de ser judío, es totalmente pronorteamericano”. El periodista le dedicó un duro editorial.

"Los que se equivocaron con Milani son los mismos que dijeron, muchos de ellos, algún periodista, que no había que nombrarlo a Bergoglio como Papa porque había secuestrado algunos sacerdotes. En vez de secuestrarlos a uno lo salvó, ese que lo salvó salió hablar y dice: cómo que me secuestró, me salvó. Así que se equivocó, se equivocan y se equivocan mucho", dijo esta tarde Hebe.

La impugnación del CELS contra Milani impactó en el Gobierno. La ONG sostuvo hasta último momento que no tenía "idoneidad para conducir un Ejército de la democracia" y dio por probado que "su unidad era el centro de la represión ilegal en La Rioja" y que "allí se torturaba"

Bonafini también defendió el reportaje que le hizo al titular del Ejército para la revista de las Madres: "Nosotras estamos muy contentas de haber podido hacer esa nota y de que el Ejército empiece a trabajar en lo que tiene que hacer, bien cerca del pueblo", contó. Aquel día, Hebe se sorprendió cuando lo vio entrar a Milani con su informe a la casa de las Madres.

Además cuestionó las críticas contra Milani por supuestas violaciones a los derechos humanos. Dijo que la denuncia "empezó con Lanata y un radical amargado que le metió fuego", en referencia al diputado Julio Martínez. Y fue muy dura con otros organismos de derechos humanos. "Los que cobraron la reparación (económica) son los que no quieren a Milani, son tan dignos... pero vendieron la sangre de los hijos, hay alguna diferencia", disparó. Históricamente, Bonafini utilizó la negativa a cobrar la reparación económica como una bandera.

Más temprano, Nora Cortiñas, referente de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, había asegurado que el ascenso de Milani significa "la vuelta a la Obediencia Debida", y afirmó que le dieron "asco" los senadores que aprobaron el pliego.

En otro tramo de su discurso, Hebe valoró el proyecto oficial para que el Estado se haga cargo de la Universidad de las Madres. Y confirmó, tal como adelantó hoy Clarín, que quiere sumar un carrera de Periodismo "para ver si terminamos con estos periodistas de mierda, que no son periodistas ni son nada, y tenemos pronto los nuestros".