El proceso se denomina pirólisis y se define como “el calentamiento de los materiales en un ambiente sin oxígeno para provocar una reacción termoquímica”. A partir de esto en la municipalidad de Berisso explican que con la basura domiciliaria que reúnen diariamente se podría generar energía eléctrica y un material para reemplazar al calcáreo.

Se trata, indican, de un sistema noruego sobre el que desde hace tiempo vienen informándose hasta haber concretado ya reuniones con empresarios del rubro.

Por ahí pasa el plan que madura en el gobierno del radical en Cambiemos Jorge Nedela en tiempos en que se anuncia el próximo funcionamiento de la planta de tratamiento de residuos que se construye en Ensenada para uso de los distritos de la región y como forma de cerrar definitivamente el relleno sanitario de la Ceamse.

“Nosotros vamos a seguir llevando nuestras 90 toneladas diarias de basura a la Ceamse pero la idea es crear nuestro propio sistema”, admiten en la comuna berissense donde se indica que el municipio paga unos $800 mil mensuales para poder depositar sus residuos urbanos en el relleno de Punta Lara.

EL PROYECTO

En el borrador del proyecto al que este diario tuvo acceso se estima que la planta de tratamiento con la que sueña el gobierno municipal berissense podría tratar unas 240 toneladas diarias de residuos, bastante más de las que se generan en el distrito con lo que “estaríamos en condiciones de recibir basura de otros distritos y no cobrarles”.

En ese marco, fuentes cercana al intendente Nedela estiman que el plan “no se interpone con el desarrollo de la planta de tratamiento de Ensenada porque la ley dice que cada comuna tiene facultades para tratar sus propios residuos”.

Sin embargo, admiten que una vez diseñado el proyecto deberá pasar por los filtros de la autoridad ambiental bonaerense.

“No contamina, no hace ruido, no afecta al Medio Ambiente y el producto final es energía eléctrica con la que se podría abastecer a los barrios cercanos a la planta y una piedra que puede usarse como reemplazo del calcáreo para arreglar calles y tapar baches”.

Pero el proyecto que entusiasma a Nedela y a unos pocos de sus colaboradores que están al tanto, tiene algunos obstáculos adelante.

El primero es económico, el segundo es legal y también político.

“La planta cuesta 15 millones de euros pero podría financiarse con capitales privados y un sistema de concesión que permita el recupero de la inversión y posterior ganancia”, señalan.

En ese contexto, se supo que el titular de Obras y Servicios Públicos de la comuna Raúl Murgia ya mantuvo reuniones con inversores locales y con representantes de una empresa china que, se señaló, “conoce el sistema y ha instalado varias plantas como las que se quiere montar en Berisso”.

El otro obstáculo tiene que ver con la necesidad de contar con herramientas legales para poner en marcha el proyecto, concretamente, la creación de una sociedad estatal con participación del Estado. Y ahí el problema, señalan, pasa a ser político: “necesitamos mayoría en el Concejo Deliberante porque el PJ no nos quiere votar nada. No han votado un crédito para hacer cloacas, menos van a querer votar esto”, especulan en Cambiemos Berisso.

En ese marco, como este diario adelantó, el oficialismo berissense espera sumar concejales en este turno electoral para avanzar sobre otro proyecto importante: la terminal de ómnibus de media y larga distancia.

“La idea es que la planta recicladora funcione en esa zona junto con una pequeña central de separación de residuos en terrenos detrás del corralón municipal”, agregan las fuentes que admiten que del resultado de la elección dependerá la suerte de los proyectos mencionados.