Un barrio de Juana Koslay quedó aislado tras la lluvia

Un barrio de Juana Koslay quedó aislado tras la lluvia

Reclaman que la calle de ingreso se vuelve intransitable. Amenazan con cortar la ruta de acceso a Potrero.

Cansados de reclamar por las condiciones en que quedan las calles tras cada lluvia, un grupo de 15 vecinos del barrio ex policial, ubicado en la ruta 18 a la altura del kilómetro 13,5 en Juana Koslay, manifestaron ayer que podrían cortar la ruta que va a Potrero de los Funes, si el Municipio no les da una respuesta.

“Nos hemos cansado de pasar notas a Vallone, de que no se puede entrar ni salir del barrio ex policial cuando llueve mucho", dijo un vecino.

Los 30 milímetros que cayeron despertaron otra vez el enojo entre los habitantes por el estado en que quedaron sus calles, con una mezcla de barro y arena. Ellos manifestaron que la calle San Luis, la principal, es la más afectada, y se transforma en un río porque el agua baja desde las sierras haciendo que sea imposible transitarla.

Juan, explicó que se cansaron de pasar notas al intendente Andrés Vallone para explicarle que no se puede entrar ni salir después de las lluvias. “Lo único que hace es mandarnos la máquina para emparejar la calle. Pero no queremos que venga más, porque ya la han bajado 40 centímetros y se ha transformado en un canal que nos deja aislados”.

La lluvia de ayer dejó los caños de agua y la malla de las conexiones de gas a la intemperie, y sobre la esquina de San Luis y Córdoba, hay una tapa de cloaca que está siendo socavada por la correntada que baja de las sierras.

“Ahora no puedo salir de mi casa, tengo un vehículo chico y se clava en el barro. En todos los años que tengo acá siempre fue igual. La ruta que va a Potrero de los Funes termina llena de agua y barro, estamos expuestos a que suceda algún accidente grave”, dijo Hugo.

Los vecinos relataron que a lo largo de los 15 años que tiene el barrio, los reclamos son numerosos y que están cansados de no ser escuchados. Afirman que les cobran tasas caras por ser una zona considerada residencial y turística y que los servicios públicos brillan por su ausencia.

Fernando dijo que mantuvieron reuniones con personal de la Municipalidad en las calles del barrio. “Vino el secretario de Gobierno de Juana Koslay, fuimos a ver los caños, le presentamos notas y todo y nunca hubo una solución, por eso es que hemos decidido llegar a cortar la ruta”, advirtió.

Además los habitantes anunciaron que padecen otros problemas. No tienen mantenimiento los espacios verdes, el lugar destinado para una plaza está repleta de yuyos y hay poca iluminación. En el fondo, al pie de las sierras, se formó un barranco que tras cada lluvia el agua se estanca por semanas, al igual en la zona de los pinos.

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