Pasaron dos elecciones, las provinciales y las municipales y la ciudad quedó colmada de afiches de todos los signos políticos. Como si fuera poco está lleno de cartones en los postes de energía eléctrica con el nombre de cada candidato, persisten los afiches de papel en las carteleras o paredes y las pintadas en paredones, tampoco han sido despintados o vueltos a su color original, como debiera ser. Lamentablemente, esta es una practica usual, tras cada campaña política o elecciones que pasan por la ciudad, algo que desde ya no es algo afable para cualquier ciudad del mundo, porque se la afea, se la ensucia y se la pintarrajea, y menos aún lo es para un destino turístico como este.

Cabe mencionar, que en Bariloche existe una ordenanza por la cual se debe multar a los partidos políticos o personas que no cumplan con limpiar los sitios aquellos donde hayan dejado su mancha de campaña.

Gustavo Genusso, pintadas y cartelitos de Vitamina GSin embargo, de eso depende que el gobierno de turno la haga cumplir. Y eso parece poco factible con el intendente, quien aún tiene sus propios afiches pegados en ciertas carteleras de la ciudad (que dicho sea de paso, el tamaño en los que están hechos están prohibidos) y que ni siquiera infraccionó a su “socio político” Bautista Mendioroz, que aún tiene numerosos paredones de la ciudad pintados con su nombre y la inscripción “gobernador”.

Es que sucede que Mendioroz fue pre candidato a gobernador por la UCR en las elecciones que se desarrollaron el 13 de marzo. Si, hace siete meses. Pero resulta difícil que se lo notifique porque es más que sabido, que Mendioroz y Cascón son socios políticos y amigos.

Lo mismo sucede con el caso de Norberto Dura, quien en todo el año no fue candidato a nada, pero la ciudad está repleta de carteles en los postes con la inscripción “Dura 2011”. Se especulaba con que llegue a ser postulante a legislador, pero eso nunca sucedió. Pero los carteles persisten allí, más allá de ser uno de los principales dirigentes de Marcelo Cascón.

Aún están las pintadas, los carteles plásticos y otros hechos de bolsa arpillera de César Barbeito.Y ni hablar de los candidatos a intendente. Todavía hay una gran cantidad de afiches, pegatinas, pintadas, pasacalles e inscripciones con sus nombres. Sólo el Frente Grande informó que ya está sacando los suyos, aunque aún hay muchísimos, más teniendo en cuenta que hizo una campaña barrio por barrio, colocándolos con el nombre de su candidato y el de cada vecindad.

Un caso a destacar, es el de Carlos Bravo, postulante a la intendencia, como extra partidario de Compromiso Cívico y Social. Bravo en persona, está retirando los carteles con su nombre. Muchos vecinos lo han visto con una camioneta y una escalera, subiéndose a los palos.

El problema de las campañas, que se utilizan todos los recursos en ellas y no queda nada para después de las elecciones y ni hablar si se perdieron. Y como siempre, gana uno sólo y pierden todos los restantes, quienes ya no tienen ni ganas, ni presupuesto para dedicarle a sus afiches.

Allí está entonces, el poder de fiscalización del estado para infraccionar a quienes están incumpliendo las normativas vigentes. Pero por ahora, desde el municipio no se ha informado de ninguna acción al respecto. Al contrario, el intendente tiene afiches en las calles con su imagen y acaba de anunciar un gabinete de emergencia.