"Estamos decididos a darle nuestro apoyo a esos compañeros (echados). Es por eso que ante cualquier aviso podríamos convocar a asambleas y avanzar en medidas de fuerza", alertó el titular del gremio de los bancarios pampeanos.

"Esta medida forma parte de una decisión arbitraria de Nación que ha empezado con los trabajadores estatales y puede ir hacia los privados. El Estado debería ser quien garantice las fuentes de trabajo, dar el ejemplo, y no al revés como lo está implementando", afirmó.

Opinó que se trata de una situación "alarmante" y aclaró que al momento, por lo menos, no tuvieron que lamentar despidos en la delegación santarroseña del BCRA.

Para Ibáñez, en medio de esta situación, las paritarias de marzo serán "muy difíciles" y recordó que las cámaras empresarias intentaron no cumplir con lo firmado en la anterior negociación. Dijo que aún no fijaron un porcentaje de aumento para discutir en la mesa de negociación porque prefieren aguardar para ver cómo se desarrollan los primeros meses del año. "Igual, nuestro fiel reflejo es la canasta del súper", deslizó.

Recordó que desde 2010 vienen reclamando la derogación del tributo a las ganancias y el mínimo no imponible, que grava el salario de los trabajadores de las entidades financieras.

En ese sentido, el gremialista contó que, presuntamente, el ministerio de Trabajo de Nación pretendería quitar el impuesto a las ganancias del sector y convertirlo en un aumento salarial, una medida que no comparten los bancarios. "El impuesto a las ganancias es un salario ganado. Queremos que nos quiten ese impuesto, cobrar todo el sueldo ganado, y a partir de ahí discutir un aumento", terminó.

En nuestra provincia se desempeñan unos 800 trabajadores bancarios, la mayoría de ellos lo hace en el Banco de La Pampa.