La Policía busca a una mujer que podría tener el dato clave para saber qué pasó con Miguel Ángel Ledesma, un joven de 22 años que recibió un disparo en el tórax el miércoles a la noche, y quien se encuentra internado en grave estado en el hospital Padilla.

Ledesma había llegado a las 21 a la guardia del centro médico y alcanzó a explicarle a un guardia de seguridad privada que lo habían baleado. El custodio le comentó a la Policía que antes de desvanecerse, el muchacho le había indicado el lugar en el que lo habían herido y que creyó entender que dijo “avenida Mate de Luna y Necochea”.

Sin embargo, cuando los policías de la seccional 3ª, a cargo del comisario Miguel Ángel Jiménez, llegaron hasta ese lugar, sólo encontraron incertidumbre. Fuentes policiales comentaron que no había manchas de sangre en el pavimento, y las personas que se encontraban en un bar ubicado en esa esquina les dijeron que no habían visto nada extraño.

Dudas

La ausencia de testigos en un lugar que suele ser muy transitado a la hora en que debería haber ocurrido el ataque, llamó la atención de los investigadores. De la misma manera, la magnitud de las lesiones que produjo la bala, hizo dudar si es posible que Ledesma haya conducido en su moto Honda Twister roja los tres kilómetros que separan el supuesto lugar de la agresión y el hospital Padilla.

Ledesma fue operado de urgencia y se encuentra en terapia intensiva en grave estado. Fuentes policiales indicaron que su madre declaró que el muchacho había llegado a su casa el miércoles a las 19, y que a los pocos minutos volvió a salir. El movimiento no había llamado la atención de los familiares, ya que el joven solía entrar y salir a toda hora de la vivienda.

El miércoles a la noche, una mujer llegó hasta la vivienda de los Ledesma, en Santiago del Estero y Viamonte, y les dijo que el joven había sido herido. Los padres de la víctima salieron inmediatamente al hospital, sin saber quién era la persona que les dio la mala noticia.

El fiscal de Instrucción de la VII° Nominación Arnoldo Suasnábar ordenó que la investigación pasara a la Dirección de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos, a cargo de los comisarios Luis Núñez y Miguel Gómez, quienes están abocados a encontrar a la mujer que supo, antes que nadie, que Ledesma había sido baleado.

“Son varias las hipótesis. Desde que intentaron robarle la moto, o que tuvo una discusión con alguien. Pero por ahora no hay nada certero”, comentó una fuente policial.