La causa por el ataque a balazos en el local partidario de La Cámpora en marzo pasado“está esclarecida”, según altas fuentes de la Justicia. Al menos así lo marcan los datos en la investigación que ya descartó la existencia de un ataque externo por parte de grupos fascistas, neonazis o algún sector opositor como fue denunciado en los medios de comunicación horas después.

“No hay elementos hoy en la causa que hagan pensar un ataque de algún grupo caracterizado”, indicó la fuente, en una noticia difundida hoy por Radio Mitre.

Los investigadores manejan una hipótesis  que está vinculada con un ataque que vendría de la propia interna del Frente para la Victoria, aunque restan definirse elementos probatorios para que avance dicha premisa.

Según la reconstrucción del hecho, un grupo de personas ingresó al lugar sin forzar los accesos, robó una computadora no denunciada por la damnificada, baleó la fachada y huyó en un vehículo que estaría siendo identificado por la fiscalía.

Se trata del local a cargo de la concejal Marina Santoro, quien había calificado el hecho como “gravísimo”, asegurando que “es un hecho intimidatorio”. “Es un atentado contra la democracia, contra la militancia a días de cumplirse 40 años del último golpe militar”, había afirmado una consternada edil, quien realizó una conferencia de prensa en el HCD y con el intendente Arroyo.

En la causa declararon más de diez personas de los cuales al menos uno fue testigo ocular. Entre ellos estuvo, lógicamente, Marina Santero. La concejal prestó tres veces declaración testimonial a los pocos días de lo ocurrido. No obstante, semanas después fue citada en más de tres oportunidades pero en ninguna asistió, pese al pedido del fiscal Eduardo Amavet.

Tras el discurso de la diputada Fernanda Raverta en la legislatura bonaerense, haciendo alusión a que los ataques fueron provocados por el actual Gobierno nacional,  hubo llamados telefónicos del abogado de la particular damnificada a miembros de la justicia para disculparse por haberlos expuesto a nivel nacional.

Desde aquel discurso los particulares damnificados no aportaron más datos y la causa estuvo estancada, según consta en el expediente.

Vale destacar que no hay cámaras de seguridad en la cuadra y se ven varios autos en las imágenes del monitoreo registradas en las inmediaciones. Sin embargo, del hecho habría participado un solo vehículo. Ese auto estaría identificado y, según versiones que maneja la justicia, circula por algunas sedes kirchneristas de Mar del Plata. Se trataría de un vehículo tuneado.

Hoy no existen suficientes pruebas para proseguir rápidamente con la investigación. Hay contradicciones en algunas declaraciones policiales, sumado a que las cámaras no grabaron las circunstancias del hecho.

“Si bien la denuncia quedó desestimada, descartando el ataque externo, la causa podría archivarse al faltar más pruebas que permitan acusar a alguna persona”, indicó una fuente.