Avanzan con relevamiento territorial-social en 23 comunidades aborígenes del extremo oeste

Avanzan con relevamiento territorial-social en 23 comunidades aborígenes del extremo oeste

De manera ágil avanzan los trabajos de relevamiento de las tierras pertenecientes a mas de una veintena de comunidad aborígenes del departamento Ramón Lista, tarea enmarcada en el cumplimiento de la Ley Nacional 26160 referida al Programa de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas.

Las labores ejecutadas de manera conjunta entre el Instituto de Comunidades Indígenas de Formosa (ICA) y el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), tuvo un activo protagonismo de los diferentes sectores de las comunidades, algo que fue destacado de manera coincidente por quienes estuvieron trabajando en terreno.

Se trata del relevamiento técnico, jurídico y catastral de la situación dominial, algo donde “Formosa ya es pionera y tiene un avance porque ya realizo tareas de titularización en las comunidades”, con lo cual esta labor “viene también a constatar ese título y a poner en valor a ese proceso que se dio a través de la ley provincial 426”. La labor tendrá su conclusión con la conformación de  una “carpeta técnica que contiene información a través de un cuestionario socio-comunitario indígena, del segmento productivo, un informe antropológico como el de las migraciones internas y la historia misma de la comunidad, además de un informe agro-ecológico para conocer las potencialidades de la tierra “.

En la región de labores que comenzó en Lote 8, Gastón Giménez del INAI explico que las labores siguen la “misma metodología que se aplica en todas las provincias argentinas donde se viene trabajando. Es participativa y con la presencia de los referentes, caciques, directores de etnias y delegados de las comunidades, incluso el vecino común que quiera ser parte de todo este proceso”. Expuso que junto a los lugareños “se confecciona un croquis, y a partir de disponer ese insumo primordial es que vamos a terreno a buscar los signos de ocupación, que tiene que ver con lo que pide la ley: La ocupación actual, tradicional y pública, entendida esta como criterio normado para ir a relevar esos puntos, que son los importantes porque se tratan de los lugares de ocupación de las comunidades”.

Tras aludir a que “no conocía la zona”, expuso que “estuve escuchando a la gente que está entusiasmada, me contaron de los muchos avances, pude ver las escuelas nuevas y otras obras, y eso fue señalado por los mayores al evocar que cuando eran jóvenes no había ni caminos. Veo el progreso, y este relevamiento puede ser una herramienta más para el avance en cuestiones de desarrollo”, para destacar el “mucho interés” de los lugareños, considerando “alentador esta receptividad en sumarse a los trabajos”.

El presidente del Instituto de Comunidades Aborígenes (ICA), Esteban Ramírez, señalo que se trata de la continuando con los trabajos ya realizados en otras comunidades como la de Osvaldo Quiroga (zona de San Martin Dos) y en La Primavera, y ahora Lote 8, para continuar en Tucumancito y Lote 1 y Tres Palmas. Explico que “técnicos del INAI y de Catastro conformaron los equipos de trabajo para ejecutar las tareas de campo con integrantes de la comunidad, sobre todo los mayores que conocen donde están los mojones o lo establecido como marca o punto referencial, para llegar a la conformación de la cartografía”.

El jefe comunal de General Mosconi, Miguel Ángel Riveros, señalo que “esto refrescara la memoria y se ratificara documentadamente el mapeo en el departamento, y verificar los limites de sus propiedades con títulos que tienen las 23 comunidades de este departamento”.

A su turno, el diputado Roberto Vizcaino expuso que “se hizo una trabajo previo para informar cada comunidad en qué consiste el trabajo y ahora en esta tarea conjunta vemos una entusiasmada participación de los mayores que fueron pioneros en la recuperación de las tierras, además de los jóvenes y las mujeres, o sea una intervención activa de los diferentes sectores comunitarios”.

Resalto la importancia que tiene este trabajo que “excede el marco de lo estrictamente la propiedad de la tierra que ya la tienen, porque además se releva por ejemplo todos los servicios nuevos que se han incorporado: las viviendas, centros de salud, escuelas en diferentes niveles, energía eléctrica, agua potable”, añadiendo que incluso en Lote 8 se trabajo en la zona que los lugareños llaman cercos, que es donde trabajan en cultivos en la época de lluvias.

Aborígenes

Uno de los principales dirigentes aborígenes de la zona, Moisés Fernández dijo que “esto de tener la propiedad de nuestras tierras es lo que siempre quisimos, y ya con este gobierno provincial nos dieron eso, aunque ahora mejor porque con este trabajo donde está la Nación queda aun más seguro la tenencia legal de la propiedad comunitaria”.

Recalco que se los haya convocado para ser activos participes en las tareas que abarca a 23 comunidades indígenas de esa región, y que “nos permitirá tener bien registrado a través de métodos modernos y seguros sobre la propiedad de las tierras, con lo que estamos brindando tranquilidad a los niños y jóvenes de hoy para los tiempos futuros.”

Otro de los aborígenes pioneros en la zona, Cándido Méndez dijo que “estamos muy contentos, porque nosotros los mayores pensamos sobre todo en el futuro de los chicos, y todo esto que se está haciendo da esa confirmación de nuestras tierras para las generaciones que vendrán.”

“Todos tenemos palabras de agradecimiento a nuestro gobernador Gildo Insfran que se preocupa en que se respeten los derechos de todas las comunidades. Y esto de las tierras tiene gran valor porque hasta nos da más tranquilidad a trabajar en la producción”, afirmo mientras acompañaba a los técnicos a uno de los mojones.

Por su parte, otro de los aborígenes ya entrado en año, Ramón Ibáñez, dijo que  “es un momento muy especial para las comunidades, porque esto demuestra un reconocimiento ya nacional, más allá del provincial, que son nuestras tierras de manera legitima. Es de alguna manera una nueva entrega de las tierras, porque la ley provincial ya hizo eso, pero ahora está el gobierno nacional dando su aval legal, por lo que es una doble tranquilidad y reconfirma la propiedad y acompaña el sentir de los aborígenes”.

“Un día muy dichoso, y estamos muy contentos porque nosotros los aborígenes estamos participando de todo los trabajos, y eso nos da mucha más tranquilidad, como también porque le da seguridad para el futuro a los más chicos”, concluyó.

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