A pesar del paro anunciado por el SUTE y de la frustrada negociación salarial, este lunes arrancan las clases en las escuelas de la provincia y desde el Gobierno no se cansaron de repetirle a los padres: "Lleven a sus hijos a clases".

En la noche de la Fiesta Nacional de la Vendimia, el propio gobernador Alfredo Cornejo dejó un mensaje para a las familias, pidiéndoles "a los papis, a los alumnos y a los maestros que asistan a las escuelas", remarcó. En el Gobierno estiman que la medida de fuerza no va a tener mucha adhesión porque, como han advertido, se descontará el día no trabajado y, en el caso de los docentes, se les quitará el ítem aula.

Con la misma tónica se pronunció el ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, quien desde el palco político de la noche vendimial instó: "Empiezan las clases, les pedimos a los padres que lleven a los chicos a la escuela, vemos que el paro no va a tener mucho acatamiento".

En ese orden, anunció que el decreto con el aumento ya está firmado y que se publicará el próximo martes. Sobre el incremento salarial detalló que aparecerá el 17 por ciento acumulativo, retroactivo a febrero, con las ayudas correspondientes para celadores y docentes (de $1.500 para vestimenta, en el primer caso; y de $1.000 para elementos escolares, en el segundo).