El aumento en los combustibles de Shell ya se advierte en Pergamino

La petrolera anunció el domingo a última hora un incremento del 12 por ciento y la suba llegó rápidamente a nuestra ciudad y el ajuste se pudo notar ayer en una de las estaciones de servicio que llevan esa bandera. Las expendedoras de diferentes compañías ya habían aplicado incrementos pequeños y dispares en algunas localidades del interior del país.

El aumento de precios que aplicó en las últimas horas a sus combustibles la petrolera Shell, llegó a Pergamino, donde se pudo advertir en una de las estaciones de servicio que llevan esa bandera, un incremento del 12 por ciento, tal como había anunciado la compañía el domingo por la noche.

La empresa explicó que debido a la evolución de las distintas variables que afectan el mercado de los combustibles en el país, Shell Argentina aumentó el precio de venta de los combustibles a su red abanderada y dejó en claro que las razones de la suba están en la devaluación del peso, que impacta en el valor que pagan por el petróleo que compran en el país y el que importan. Sin embargo, la mayor preocupación es que este aumento podría ser el paso previo para un ajuste en el resto de las petroleras.

En los últimos días las estaciones habían comenzado a aplicar aumentos puntuales en el interior del país. Las subas abarcaban sólo algunas localidades y algunos productos, superando los 13 pesos por litro en Corrientes y Entre Ríos, y 12 pesos en Catamarca y Santa Fe.

A excepción de YPF, que determina el precio para toda su red de estaciones y éste debe respetarse sin alteraciones, el resto de las compañías (Shell, Oil, Axion) trabajan con el sistema de “reventa”. Es decir, envían precios “sugeridos”, a las estaciones de la cadena, pero los propietarios tienen margen de maniobra para determinar a qué valor comercializar los productos, garantizando su propio margen de ganancia.

En Pergamino

A partir del reciente anuncio de la empresa Shell, en el orden local ese 12 por ciento de aumento se vio reflejado en la estación de servicio ubicada en la superposición de rutas Nº 8 y 188 y calle Batalla de Bailén, donde el combustible diesel alcanzó los 12,8 pesos por litro, la nafta súper 11,9 pesos por litro y la nafta más refinada 12,9 pesos por litro.

El costo de los combustibles ya había sufrido incrementos pequeños y dispares en algunas localidades del interior del país y a raíz de la última suba aplicada por Shell temen que se dispare el valor de otras petroleras. Sin embargo, las expendedoras de bandera YPF y Petrobras de nuestra ciudad consultadas, no modificaron sus costos en los últimos días, en tanto que la estación de servicio Esso ubicada en ruta Nº 8 y José Hernández aplicó un 3,8 por ciento el domingo debido a la modificación de costos de la petrolera que llevó a las expendedoras a realizar un ajuste.

Surtidores

El incremento de los combustibles de la firma Shell es el más importante que decide aplicar una petrolera en los últimos meses. El primer día del año, tanto Shell como YPF llevaron a cabo subas en el precio de los combustibles de un promedio de 7 por ciento.

La reciente decisión de la petrolera está directamente vinculada con la devaluación del peso y las características de la industria petrolera, cuyos costos están altamente dolarizados.

“Estamos haciendo un traslado parcial del fuerte incremento en pesos que se está produciendo en el costo del petróleo crudo, nuestro principal insumo” explicó la compañía a través de un comunicado.

Es por eso que, en la práctica, el resto de las petroleras analiza también aplicar remarcaciones en sus pizarras, desde YPF hasta Petrobras, Axion (opera bajo la marca Esso) y Oil (del empresario Cristóbal López), pero aún no decidieron dar ese paso.

Si bien Shell tiene un porcentaje de mercado en torno al 13%, coloca al resto de las petroleras en una situación particular. Si no aumentan los precios, es probable que comiencen a absorber más demanda en un contexto en que el negocio no les resulta rentable. Es por eso que, si bien hay diferencias en los valores, todas suelen tener precios relativamente parecidos.

La devaluación dejó a las petroleras en medio de una situación complicada. Pese a que sus costos están dolarizados, sus ingresos son en pesos. Hasta ayer, el litro de nafta súper costaba, en moneda dura, incluso menos que en abril de 2012.

El año pasado, los combustibles registraron un aumento cercano al 40 por ciento. Sin embargo, la pérdida de valor del peso licuó esos incrementos desde el punto de vista de las refinadoras.

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