Aumenta la tensión entre Europa y Estados Unidos por el espionaje

Aumenta la tensión entre Europa y Estados Unidos por el espionaje
La UE debatirá el caso en una reunión y, antes, Merkell y Hollande hablarán sobre el tema en privado; "Epiar a los amigos es totalmente inaceptable", insistió la canciller; revelaron que Italia también fue espiada por Londres

La canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés Francois Hollande aunarán hoy sus críticas al programa de espionaje de Estados Unidos sobre sus gobiernos, antes de una reunión de la Unión Europea (UE) en la que también se hablará del mismo tema.

Mientras tanto, el periodista Glenn Greenwald, que destapó el escándalo con los documentos que le proveyó el ex agente de la CIA y la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA), reveló que Washington contó con la colaboración de Gran Bretaña para espiar a Italia.

La cumbre regional de dos días en Bruselas, convocada para discutir una serie de problemas sociales y económicos, se verá opacada por el debate sobre el supuesto espionaje de Washington sobre dos de sus aliados más cercanos de la UE, Francia y Alemania, como se reveló en los últimos días.

Merkel y Hollande mantendrán un encuentro bilateral, antes del inicio de la cumbre, para debatir sobre el controvertido programa de espionaje masivo de Estados Unidos, que ya le valió a Washington conflictos con países de distintos puntos del mundo.

"Desde que [en junio] hablamos sobre la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense, se lo he dejado claro también al presidente Obama: espiar a los amigos es totalmente inaceptable", señaló Merkel a su llegada a la cumbre de la UE en Bruselas.

"Se lo he dicho a él en junio, cuando estuvo en Berlín, en julio y también ayer en una llamada telefónica", recalcó la canciller.

Para Alemania, el asunto es particularmente sensible. El Gobierno no sólo dice que tiene evidencia de que el teléfono personal de la canciller fue monitoreado -motivo por el cual Merkel llamó enfurecida al presidente estadounidense, Barack Obama, quien lo negó- sino que la sola idea de espionaje trae el recuerdo de las escuchas que efectuaba la policía secreta de la ex Alemania oriental, donde creció la líder.

Por el caso, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Guido Westerwelle, convocó al embajador estadounidense en Berlín para que dé las explicaciones pertinentes.

La información divulgada ayer por el gobierno alemán llegó poco después de que en Francia el periódico Le Monde reportara que la NSA había recolectado millones de registros de llamadas telefónicas francesas entre diciembre del 2012 y enero del 2013, lo cual despertó la ira del gobierno de Hollande, quien buscará hoy consenso entre los europeos para condenar el programa de espionaje.

No será una tarea fácil para el líder socialista. A pesar de la conmoción que crean en Europa estas revelaciones, muchos países, como España y Gran Bretaña, consideran que se trata de asuntos únicamente bilaterales y que la UE no es un ámbito para discutirlos.

"UN TEMA MUY SENSIBLE"

Antes de dar comienzo a la cumbre, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, afirmó que el derecho a la privacidad es "fundamental" y "muy sensible" en la UE.

"Las revelaciones sobre espionaje o servicios de inteligencia en Europa son un tema muy sensible", dijo Barroso a la prensa y añadió que los europeos "consideran el derecho a la privacidad como fundamental y no pueden hacer como si fuera algo accesorio".

En tanto, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, señaló por su parte que el texto de conclusiones que los Veintiocho tratarán de acordar hoy "menciona la importancia de la directiva de protección de datos", con vistas a reforzar la confianza de los consumidores y de las empresas.

REGULACIÓN

Las acusaciones podrían alentar a los miembros del bloque a respaldar una serie de normas duras sobre la privacidad de los datos que está siendo delineada por la UE.

El Parlamento europeo aprobó esta semana un paquete de leyes que reformarán las normas de protección de datos de la UE que datan de 1995. Esta reforma restringiría el modo en que los datos obtenidos por firmas como Google y Facebook en Europa son compartidos con países no europeos, introduciría el derecho de los ciudadanos a requerir que sus rastros digitales sean borrados de internet, e impondría multas de hasta 100 millones de euros para quienes incumplan esas normas.

ESPIONAJE CONJUNTO EN ITALIA

En este escenario, Greenwald reveló en una entrevista al el "L'Espresso" que Estados Unidos junto a Gran Bretaña espiaron las comunicaciones italianas.

La entrevista al periodista, que renunció esta semana a The Guardian, se publicará mañana pero "L'Espresso" anticipó hoy un fragmento. Según Greenwald, Italia, además de haber estado bajo el control del PRISM, el programa de vigilancia electrónica puesto en marcha por los servicios secretos estadounidenses, también ha sido espiada por un programa británico, conocido como Tempora.

Los servicios secretos británicos espiaban en Italia los cables de fibra óptica por los que corren las llamadas de teléfono, los correos electrónicos y el tráfico de Internet, reveló el periodista.

Para esta recolección de datos, según los documentos de Snowden, se contaba con un "acuerdo" con los servicios secretos italianos. Las informaciones recogidas por los británicos, añade el periodista y abogado estadounidense, eran después intercambiadas con las de la NSA.

Comentá la nota