Existen personas que encuentran su lugar en el mundo siguiendo el mandato de su corazón, de su espíritu libre y su instinto de supervivencia, ya no la del hombre, sino del ser. Un artista es eso.

Y como prueba de ello está Abel Márquez, de profesión Artista Plástico, estudió en Colegio Padre Juan Muzio de Trelew y en la Universidad Nacional de Córdoba.

Hoy vive en Hollywood (Florida) lugar adonde lo llevó su talento y su dedicación a una técnica de pintura en la que ha desarrollado la impresionante expresividad de su genio creativo. Próximamente, Abel Márquez estará de regreso en estas tierras, mostrando y compartiendo experiencias. Antes dialogó, en exclusiva, con Jornada.

-¿Cómo se dio lo de irte a vivir a EE.UU.? ¿Fue el arte lo que generó la posibilidad?

-Mi decisión de radicarme definitivamente en USA no se dio como una propuesta de trabajo en la rama del arte, sino como una necesidad de encontrar un mejor espacio para poder desarrollar mi carrera y seguir luchando para sacarla adelante, en esos momentos a pesar de tener alumnos particulares, más un trabajo estable las condiciones económicas cada vez me presionaban más. Recuerdo que una situación que disparó esas ansias de buscar otros rumbos fue el hecho de que al regresar de recibir la Medalla de Plata en dibujo en el Salón Nacional de Salta y me encontré con que estaba sin luz. Claro, el dinero de la cuenta de la luz lo había usado para pagar parte de los gastos del viaje a Salta. Me sentí en un pozo con no mucha luz en el futuro, ese hecho tan cotidiano para muchos argentinos se transformó en una de las gotas que rebasaron mi vaso.

Al año siguiente estaba haciendo las valijas. Y gracias a mi padre que me ayudó con el pasaje, salí a buscar otras posibilidades, con 450 pesos en el bolsillo, un rollo con dibujos, una valija y muchas ganas de salir adelante

-Comentame sobre los premios que conseguiste y hacé referencia a la actividad de los museos y salones de muestras con los que te hayas relacionado. 

- Mi obra ha recibido en los últimos años muchos premios, pero sin duda el que me abrió más puertas, más expectativas, y más reconocimiento fue el recibir en el año 2008 la medalla de oro de la Sociedad Americana del Pastel en la ciudad de New York.

Fue la primera vez que premiaban a un artista argentino y latinoamericano, con anterioridad solo habían homenajeado al gran Claudio Bravo.

Meses después llega el premio Ruth Richeson-Unison Pastels Award de la revista especializada The Pastel Journal, distinciones en The Artist Magazine, en las Sociedades de pastelistas de Cape Cod, Chicago, Connecticut, New Mexico, en el circuito de Museos el haber sido seleccionado por el curador del Butler Institute for American Arts en Ohio fue el mejor acercamiento al circuito de los grandes Museos norteamericanos.

-¿Cómo fue el proceso de adaptación? ¿duro o sin problemas?

- El proceso de adaptación a un nuevo país, forma de cultura , etc. ha sido muy normal, paulatino, a pesar de que en la ciudad de Miami donde residí por años se mezcla mucho lo latino con lo anglosajón al principio lógicamente todo resultó nuevo, diferente, el idioma siempre es un tema extra, comenzar a estudiar inglés después de salir de trabajar, aprender sobre cómo se maneja la sociedad, las leyes, etc. lleva a que en los primeros tiempos el nivel de stress sea bastante alto, pero la ilusión de que esa lucha diaria tenga una recompensa ayuda a seguir y no decaer.

-¿Cómo es tu actividad profesional allá?

-En los últimos años me he dedicado no solo a la producción de mi obra particular, enviar a concursos nacionales e internacionales, sino a la docencia online, todos los días lunes por 2 hs me conecto en mi taller y dicto clases a un grupo de alumnos que residen en España, este grupo se ha mantenido en el tiempo y muchos de ellos ahora han abierto sus propios talleres, dan clases, se consolidan como profesionales.

Pero los días lunes siguen en mis clases, para mí más que un trabajo es un gran placer profesional y personal, uno de ellos por ejemplo, Alberto Piedra Fernández, está participando en concursos en USA y su obra ha sido premiada en varias oportunidades también.

-Estarás en tu pueblo natal muy pronto ¿Qué sensaciones y expectativas te genera el hecho?

-El hecho de volver a Trelew produce una serie de emociones lógicas, después de 32 años me reencontraré con algunos de mis compañeros con los que egresé del secundario, también familiares, vuelvo para encontrarme con estudiantes, artistas y aficionados para pasar parte de mi experiencia como artista especializado en pastel, tratar de sembrar esa hermosa inquietud por esta técnica poco difundida en Argentina y muy reconocida internacionalmente, espero dar lo mejor de mí en Trelew

-¿Qué podés adelantar del curso que darás en Trelew?

-Este curso está pensado para quienes han tenido poco o ningún encuentro con esta técnica, daré un panorama global de lo que significa el pastel y sus posibilidades en USA, Europa, competencias, revistas que lo difunden, los materiales en el mercado internacional, etc.

Posteriormente haré una demostración para enseñar la técnica, y después los alumnos tendrán la oportunidad de comenzar sus propios trabajos con pasteles y papeles, recibirán consejos técnicos, ayuda y respuestas a todas las inquietudes que se les puedan plantear.

Al final del curso entregaremos diplomas que acrediten su participación. Los interesados pueden comunicarse al teléfono 154 36 40 94. Se hará en la Escuela de Formación Docente Nº 805 los días 20 y 21 de 9 a 13 hs.