Las áreas industriales no incluyen créditos blandos

Las áreas industriales no incluyen créditos blandos
El municipio delimitó un sector de 35 has donde se pueden desarrollar actividades de alto impacto ambiental. Las empresas que se instalen en el predio podrán acceder a préstamos pero a tasas que van de 7,5% a 15%.

Las empresas de alto impacto que decidan radicarse en las nuevas áreas industriales delimitadas por la Secretaría de Planeamiento Urbano municipal, no tendrán los mismos beneficios crediticios que tienen las que se ubican dentro de los parques industriales.

La principal desventaja es la tasa para acceder a los créditos. En orden a una política local de promoción industrial, a las compañías que están en los parques industriales, la Provincia les subsidia 4 puntos de una tasa de interés de 7,5%, con dos años de gracia y cinco para la devolución. En tanto que “no se les subvencionará las tasas de interés de las líneas de préstamos a las empresas que se ubiquen en las áreas industriales nuevas”, explicó Gerardo Márquez, secretario de Industria de la Provincia.

De ese modo, las compañías podrán tomar préstamos a tasas que oscilan entre el 7,5% y el 15%. “Pero tendrán la mayoría de los beneficios que tienen los parques industriales”, aseguró el funcionario. Gozarán de las exenciones impositivas de sellado en impuestos provinciales y municipales, y podrán acceder a las distintas ofertas de financiamiento que otorga el Banco de Inversión y Comercio Exterior, el banco Macro y el Consejo Federal de Inversiones.

La zona de 35 hectáreas que la Secretaría de Planeamiento Urbano determinó que podrá ser de uso industrial parte del punto donde finaliza el parque industrial (en sentido sur) y se extiende hasta el límite con el departamento de Cerrillos.

Las compañías que allí deseen radicarse, primero deberán comprar las tierras a privados y luego instalar los servicios correspondientes. “Esos predios están en manos de particulares y el Estado no va a expropiar las tierras”, agregó Márquez en respuesta a lo que se especuló en un primer momento de que sería el Estado quien expropie las tierras privadas.

Entre el parque industrial y la nueva zona hay 10 hectáreas municipales ocupadas por el exbasural La Pedrera (matrículas 5.214 y 1.099) que se descartaron. Son inutilizables ya que puede haber algún riesgo por emanación de gases o hundimiento dado que es una tierra que no está debidamente compactada.

Los límites definidos para esa nueva zona, y que el Concejo Deliberante aprobó son los siguientes:

Hacia el norte: es el límite sur del Parque Industrial de Salta (donde finaliza la avenida Ricardo Durañona). En sentido sur: hasta la intersección del límite sur de la matrícula N§ 1.100 de Salta. Para el este: desde el límite mencionado hasta la cota 1.225 que se ubica al oeste de la ruta provincial N§ 39. Hacia el oeste: margen izquierdo del río Arenales.

En diálogo con El Tribuno, Gabriela Poliotto de la Secretaría de Planeamiento Urbano municipal, explicó que “no se trata de una ampliación del parque industrial, sino que es factible extenderse hacia el sur creando un cordón industrial que llegará hasta Cerrillos”.

Nuevas áreas para servicios y logística

Otro proyecto llegó Nuevas áreas para servicios y logísticaal Concejo Deliberante capitalino proveniente de la Secretaría de Planeamiento Urbano. Propone la habilitación de 38 hectáreas, ubicadas cerca del aeropuerto, como zona apta para la instalación de empresas de servicio. “Solo empresas de servicios podrán establecerse allí, por tratarse de una zona agrícola y residencial”, explicó a El Tribuno la titular de ese organismo municipal, Fanny Velarde.

La necesidad de ubicar empresas de servicios en esas hectáreas parte de la iniciativa que pretende desarrollar el transporte aéreo de cargas en el aeropuerto. “Buscamos que el transporte de cargas pueda crecer y desarrollarse de modo que el uso de la zona podría servir como apoyo logístico para las empresas”, apuntó Márquez.

La posibilidad de que la mercadería llegue a Salta y de inmediato cuente con el acceso a la autopista circunvalación, implica una ventaja en materia de logística para las compañías de transporte de carga.

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