Sin apoyo de intendentes, Duhalde va por la intervención del PJ

Sin apoyo de intendentes, Duhalde va por la intervención del PJ

En un escenario de ebullición permanente en el que ninguno de los dirigentes que aspiran a suceder a Fernando Espinoza al frente de PJ bonaerense tiene los votos necesarios para garantizarse el triunfo, el ex presidente Eduardo Duhalde irrumpió en la escena para impugnar el llamado a internas del 17 de diciembre por errores técnicos que violan la carta orgánica del partido.

 

El plan A del también ex gobernador, había sido cerrar un acuerdo con Sergio Massa y Florencio Randazzo para hacerse con el control del partido y trabajar en la reconstrucción de la estructura del PJ mientras que los ex ministros del kirchnerismo se abocaban a la construcción y acumulación política de cara al 2019.

Sin embargo, esa posibilidad fue descartada luego de los magros resultados obtenidos por los candidatos de 1País y de Cumplir, que debieron entonces empezar a mirar al PJ a nivel nacional para encontrar un paraguas de contención después de la debacle electoral, por lo que desde el duhaldismo también trazaron una nueva estrategia.

Apenas conocido el llamado a elecciones internas, que fue presentado por la vicepresidenta del partido, Cristina Álvarez Rodríguez, a cargo por la licencia que tomó Espinoza para ser candidato de Unidad Ciudadana, desde Justicia y Dignidad Peronista cuestionaron la medida y en una presentación solicitaron su anulación por no cumplir ni los plazos ni los requisitos que impone la carta orgánica.

Si bien la presentación fue impulsada como un formalismo que busca solo corregir la convocatoria y ajustarla a derecho, el plan de fondo es forzar una intervención del PJ si no dan los tiempos para que la interna se organice correctamente y para eso ya hay algunos nombres anotados, atento que el ex presidente no querría ocupar el cargo de "interventor".

El primero es autoposturlarse para ese espacio es el intendente de José C. Paz, Mario Ishii, que ya tiene a su tropa trabajando en pos de un posible desembarco al frente del partido a nivel provincial. La intención del hombre del poncho es "peronizar" el partido y relegar a los kirchneristas a lugares secundarios, además de convocar a todos los dirigentes que hoy abrevan en otras fuerzas políticas, incluidos aquellos que forman parte del oficialismo.

Si bien no hay confirmación, los trascendidos indican que Ishii podría ocupar el lugar también para liberar de responsabilidades a los dirigentes que deben dedicarse exclusivamente al armado electoral para el 2019, aunque nadie descarta que finalmente el "piloto de tormenta" del PJ sea el ex presidente Duhalde.

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