La imponente obra, realizada por el artista Fernando “Tirso” Pavolini y emplazada en lo alto del cerro de Villa Don Bosco, se sumó a partir de ayer a las propuestas turísticas con las que cuenta Tandil.

Alrededor de las 14.30, comenzaron a salir las combis y colectivos transportando funcionarios, concejales, periodistas, reporteros gráficos e invitados en general hacia la cima del cerro en el que se erige la flamante escultura que tiene una altura de alrededor de 14 metros incluido su basamento y que será visible desde distintos puntos de la ciudad.

Por último, arribó a la cima del cerro el gobernador Daniel Scioli junto a sus colaboradores y se dio inicio a la bendición y descubrimiento del Cristo.

Estuvieron presentes durante el encuentro, además de Scioli y Lunghi, el director ejecutivo de la Anses, Diego Bossio; el ministro de Desarrollo Social de la Provincia, Eduardo Aparicio; el secretario de Servicios Públicos provincial, Franco Laporta y el senador Carlos Fernández.

A su vez, participaron del acto, el tandilense y presidente de Absa, Guillermo Scarcella y el asesor del Ministerio de Asuntos Agrarios, Aniceto Chambrillón. Asimismo, estuvieron el presidente del Concejo Deliberante, Juan Pablo Frolik; el jefe de Gabinete, Marcos Nicolini; funcionarios de distintas áreas del gobierno comunal, concejales radicales, del Frente para la Victoria y del Frente Renovador.

De Apymet, su presidente Marcelo Terú y Omar Farah. Además, por supuesto estuvo presente el autor de la obra “Tirso”.

En una tarde soleada y en medio de un paisaje único, ya que desde el cerro pueden apreciarse distintos puntos de la ciudad como el cerro de La Movediza, el Parque Independencia, el monte Calvario, el cerro de Las Animas y el Valle Escondido, cientos de familias se acercaron para conocer la enorme escultura.

Cabe recordar que este emprendimiento surgió como una iniciativa conjunta del Municipio y Apymet (Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Tandil). La fundición estuvo a cargo de Fundición Hierros Tandil, mientras que el traslado y emplazamiento de la obra fue efectuado por la firma Edgardo Vázquez. Asimismo, el Gobierno bonaerense posibilitará la próxima iluminación con energías renovables.

Cabe destacar que la Villa Don Bosco, de la congregación salesiana, tiene además de sus características naturales excepcionales, un valor simbólico muy especial porque albergó en varias oportunidades durante su juventud a Jorge Bergoglio, el papa Francisco.

Descubrimiento de la escultura

Con ayuda de un operario que trabajó con una grúa para cortar la tela que recubría al Cristo, Lunghi y Scioli descubrieron la escultura. La tarea no fue tan sencilla a causa del viento, que para esas horas se había tornado bastante intenso.

Finalmente, junto a una emotiva suelta de palomas, la imponente obra quedó descubierta frente a la ciudad.

A continuación, en representación del obispo, el vicario general monseñor José Luis De Pacuale, bendijo la escultura. “Es realmente un motivo de gran alegría bendecir hoy al Cristo de las Sierras en este hermoso marco natural que Dios nos ha regalado y que ha embellecido el trabajo de los hombres”, expresó.

“Agradecemos que se pueda combinar tan bellamente nuestra fe con el trabajo del hombre, sobre todo de la industria metalúrgica tan característica de Tandil”, manifestó.

Por último, el padre Troncoso afirmó que “acompañamos este momento tan hermoso donde los que realmente tengan fe son bendecidos y aquellos que busquen un camino en la vida lo puedan encontrar en este lugar”.

La segunda parte del evento se concretó en el escenario situado al pie del cerro donde se trasladaron todos los presentes, mientras que muchas otras personas aguardaban el acto central y el espectáculo musical.

Un día de emoción

En primer lugar, Omar Farah, de Apymet, expresó que “es un día de muchísima emoción y coronación del esfuerzo, el trabajo conjunto, el decir y sentir de un sector claramente identificado con la tradición de esta ciudad, como es el sector metalúrgico. Hoy decimos nuevamente presente con esta nueva obra para Tandil, que trascenderá nuestras vidas y acompañará el destino de nuestras instituciones en el futuro”.  

“Esta es una gran idea, una gran iniciativa y como toda gran iniciativa debe tener un gran equipo de gente para poder concretarla. Esto fue un desafío para los fundidores, saber cómo iba a salir cada parte. Salió perfecta”, destacó.

Por último, sostuvo que “esto es para la ciudad de Tandil y créanme que aún hay empresas y personas que trabajan por el honor y el prestigio. Esto es un ejemplo de ello, que el esfuerzo se valora y el reconocimiento llega”.

“Nuestro lugar en el mundo”

A continuación llegó el turno del intendente Lunghi quien comenzó agradeciendo al “amigo Daniel, no le digo gobernador porque ya es un tandilense más porque prácticamente tenemos la suerte de que cada 15 días, nos visita”.

Asimismo, agradeció a “todos los que de alguna manera estuvieron trabajando, a los muchos que supieron unir sus intenciones, la dedicación y la ilusión. A Apymet, a Omar Farah, a la fundición Hierros Tandil con Adrián Miguel a la cabeza, a Talleres Tandil, al escultor Tirso Pavolini, a la Cooperativa Vial de Tandil, a la empresa Cagnoli, a Edgardo Vázquez, a Marcelo Alonso, a la firma A todo Color de Adrián López, a Horacio Morrone, a todas las áreas de nuestro Municipio y a la Congregación Salesiana”.

Además, volvió a agradecer al Gobernador por “su acompañamiento constante, su afecto por Tandil, por haber hecho realidad con una decisión, trabajando juntos, un logro histórico de toda la comunidad como es la Ley de Paisaje Protegido, para preservar y cuidar nuestras sierras, nuestro patrimonio, nuestra identidad. Es nuestra obligación renovar la responsabilidad de cuidar el ambiente, en un mejor futuro y presente”. “Qué maravilla ver desde lo alto de este cerro nuestra ciudad. Aquí tenemos nuestra historia, antepasados, familia, amigos, tenemos nuestros próceres, nuestros personajes de leyenda y los heroicos sin nombre. Nuestros pioneros, esos que desde hace  más de 191 años, siempre diferenciaron a esta ciudad como líder, diversa y sensible. Tuvimos, tenemos y tendremos gente de lucha que se destaca siempre, porque es buena gente”, afirmó.

Y añadió que “en este mundo complicado, violento y tan material, parece que los valores espirituales van perdiendo vigencia. Tal vez, podamos hacer un esfuerzo, renovar los actos de fe, los gestos de piedad y misericordia, y reconocernos en ellos. El papa Francisco nos vuelve al modo de la fe cotidiana”.

“Aquí, en nuestro paraíso serrano, sentimos las raíces. En medio de este paisaje, desde la altura del cerro de la Villa Don Bosco, podemos reflexionar y contemplar nuestro maravilloso lugar en el mundo. Este pedazo del planeta que llamamos Tandil y que amamos con profundidad y convicción forjado a través de generaciones, que nos enorgullece, nos conmueve, nos obliga a la tarea compartida y decidida de cuidarlo día a día”, manifestó.

Sin colores políticos

“Parece que en las alturas, el alma está más a mano, que se renueva el sentimiento de la fe. Yo me eduqué en colegio religioso. Pero la fe con mayúsculas la aprendí en el ejercicio de la medicina por casi 40 años. Allí al lado de las mamás y papás llorando por un hijo enfermo. La hice carne con cada llamado de urgencia, con cada temblor infantil y cada rosario en la cabecera de la cuna o en las medallitas abrochadas a la ropa de los pacientes. Así aprendí la fe, esa que sólo pide levantar la mirada, sentir que los milagros son posibles y encender la esperanza para iluminar el camino”, señaló.

 “Aquí, la comunión es con el paisaje majestuoso: de piedra y verde, de valle y sierra. Con todo mi corazón, le pido al Cristo de las Sierras que nos bendiga por siempre. Que nos dé fuerza y valor para seguir trabajando todos juntos, con la unión en la diversidad por sobre las diferencias, sin importar los colores políticos, para seguir cuidando este Tandil que agradecemos como una bendición. Disfruten del día de hoy, el futuro pertenece a la belleza de los sueños”, reflexionó. 

A continuación, Omar Farah y Adrián Miguel le entregaron a Daniel Scioli la réplica en miniatura del Cristo de las Sierras.

Posteriormente, se le hizo entrega de un ramo de flores a Karina Rabolini y, por último, el autor de la flamante obra, Tirso Pavolini, le obsequió un reloj al Gobernador.

Espectáculos y visita al Cristo

Luego de los discursos y la entrega de obsequios, cientos de familias ya se encontraban sentadas en reposeras o en el piso disfrutando de unos mates con masitas o facturas y dispuestas a escuchar los espectáculos musicales.

En primer lugar, Raúl Lavié interpretó el tema "Ave María" y posteriormente se presentaron los artistas José María Carotti, Juan Carlos Echeverri, el Grupo Vocal Surcanto y el Coro Estable Municipal, dirigido por Annele Moroder.

Mientras tanto, los vecinos y turistas presentes pudieron apreciar las acrobacias realizadas por un avión alrededor de la flamante escultura, conformando una bellísima postal.

Luego, los artistas locales se presentaron de manera individual y finalmente interpretaron en conjunto un fragmento de la obra musical “La Misa Criolla”.

A modo de cierre, se presentó el cantante marplatense Nahuel, que llegó a la ciudad pocas horas después de abrir el show de Ricardo Arjona en el Estadio Mundialista de Mar del Plata. Durante poco más de una hora el joven cantante repasó varios de los temas de su primer disco “Aquí estoy” en lo que se convirtió en una verdadera jornada festiva.

Alrededor de las 17 se abrió por primera vez al público el sendero que conduce al Cristo y, en pocos minutos, una columna de gente copó la sierra y rodeó la flamante escultura.

En contra de la Policía Local

Entre el público se encontraban referentes del grupo que está en contra de la Policía Local, con carteles manifestando esta postura. La agrupación luego se trasladó a la avenida Don Bosco con pancartas para hacer ver su desacuerdo a todos los vecinos y turistas que se acercaban a la zona.