El Superior Tribunal de Justicia ordenó a una empresa de medicina prepaga a reintegrar importes de un tratamiento kinesiológico y transporte para integración educativa de un joven con parálisis cerebral espástica de Villa Regina.

Según surge del informe de especialistas, el chico "requiere de cuatro sesiones semanales de kinesiología" y, además, debe recorrer 16 metros diarios con acompañante para llegar al establecimiento escolar al que concurre.

La empresa reconoció los gastos durante algunos meses y luego dejó de abonarlos. Por esta razón, los padres presentaron un amparo.

El fallo hace hincapié en que “la Jueza de amparo tuvo en cuenta la normativa legal, constitucional y convencional que garantizan el derecho a la salud de las personas con discapacidad". Además, tuvo por acreditado el padecimiento del adolescente, quien requiere de un neurólogo infantil, traumatólogo, kinesiólogo, terapia ocupacional, psicopedagogía, equinoterapia y concurrencia a un centro de día e hidroterapia.