“La alta tasa de uso que hacen los aborígenes del hospital lomitense demuestra que están conformes”

“La alta tasa de uso que hacen los aborígenes del hospital lomitense demuestra que están conformes”
Para la directora de Prestaciones de Salud de la cartera de Desarrollo Humano, Cristina Mirassou, la mejor respuesta de la mentira que representan las supuestas discriminaciones a los aborígenes en el nuevo hospital distrital de Las Lomitas, como argumento para cortar la ruta 81, esta dado en la alta tasa de uso del nosocomio que hacen los originarios, de un 60%”.

Expuso que “no hay quejas de los familiares de aborígenes internados y tampoco de quienes hacen un uso para cuestiones como controles o vacunas. Están conformes con el trato que se les brinda, incluso bastante bien adaptados al cambio a partir de pasar de un hospital de características rural a otro de mayor complejidad con otros espacios y requerimientos”.

Afirmo que “el equipo de salud de Las Lomitas viene realizando un muy buen trabajo, hablando con los agentes sanitarios y caciques, ante quienes se expuso las bondades del nuevo hospital y algunos aspectos que se deben tener en cuenta para su óptimo funcionamiento. Se los convoco al hospital, se les mostro cada sector y como eran las reglas para todos”. Comento que “incluso se incorporaron tres trabajadoras sociales, las encargadas de estudiar cada caso, donde se atiende el contexto y en ese marco se disponen algunas excepciones que pueden ser entendidas, como ante determinado contexto que amerita sobre la permanencia de cuidadores por una mejor contención del paciente. Es decir se tiene muy en cuenta aspectos personales determinados y lo cultural”

Destaco que “tenemos la experiencia de décadas atrás cuando se escapaban los pacientes aborígenes de los hospitales porque no estaban contenidos por no tenerse en cuentas algunas de sus costumbres. Esto ya no pasa, y se atiende no solo la parte técnica, sino también la social, y en nuestro caso tiene un rol muy importante el abordaje cultural”.

Dijo que hacía hincapié en todo esto por ser argumentos tomados por los indígenas como fundamento para cortar la ruta, que afirmo queda demostrado “carecen de sentido”.

“Estos que están cortando la ruta son un grupito de indígenas que son conocidos, sobre todo por protestar por una u otra cosa de manera permanente. Y uno no termina sabiendo bien cuales son realmente sus reales reclamos. En esto pueden haber incluso intereses muy personal, sectoriales o políticos, realmente esto no es racional, menos aun en este tena de salud donde se ha tenido de manera muy especial el tema indígena y se ha consensuado con ellos todos los aspectos que hacen a la atención a esta población”.

Para la doctora Mirassou “la tasa de uso que está teniendo el hospital en cuanto a población indígena, no solo por cuestión de una enfermedad, sino para ir a vacunarse o controles periódicos, no disminuyo para nada. Insisto porque es muy elocuente, un buen dato que marca la no discriminación esta dado en que el 60% de las personas atendidas en este hospital son indígenas, es decir que existe una aceptación a los servicios que allí se brinda y muy demostrativo que el reclamo de ese grupito no se condice con lo que piensa la gran mayoría”.

Concluyo subrayando que “hay todo un proceso que transitar, dentro del cual está este aspecto cultural, que insisto, tiene un abordaje integral y muy bueno con respecto a la población indígena, para lo cual se ha conformado todo un equipo de profesionales multidisciplinarios junto a agentes sanitarios aborígenes, por lo que se plantea es ilógico”.

“Se los tiene muy en cuenta”

Profesionales del nosocomio, como el director adjunto, Javier Trachta, señalo que “de ninguna manera existe algún tipo de discriminación. Por el contrario, sabiendo que tenemos un importante población aborigen, se adoptaron medidas que están adecuadas a las pautas culturales de los indígenas, y que se consensuo con los propios caciques y dirigentes de las comunidades”.

Marco que “si bien todo cambio produce algunos roces, como el que se fijo en este hospital que debe adecuarse a algunas normas más estrictas dada su mayor complejidad, en este caso con los aborígenes siempre se atendió las particularidades sociales”. Incluso señalo que se les hizo ver que no deben preocuparse porque un familiar internado tiene una dieta específica, es algo que esta prescripto dada la patología que padece, y que no es necesario ni bueno que ingresen comida y tampoco bueno para el paciente que la ingiera, incluso esto atrae a insectos, que lo aceptaron de buena manera. De ahí la extrañeza que se aluda a estos aspectos para justificar la protesta en la ruta, donde dijo que acudió días atrás y que charlo con los aborígenes que estaban allí, y que se mostraron conformes, por lo que se mostro extrañado que estos hayan retomado el corte

Una barbaridad

“Es una barbaridad. Inadmisible desde todo punto de vista, por lo que no debemos permitir que se desprestigie con afrentas a esta institución que amamos y que todos juntos estamos construyendo”. Fue la respuesta categórica del doctor Ricardo Guglielmone ante dichos de los aborígenes sobre la “locura” que a sus muertos se les entregan sin órganos.

El profesional, jefe de Cirugía del hospital distrital lomitense, afirmo que “no se debe permitir tamañas locuras. Es increíble que se digan estas cosas y mucho más que se las tome con algún grado de seriedad”.

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