Mas de la mitad del Gran Mendoza se quedará sin servicio de agua potable o con baja presión en la provisión a los domicilios entre mañana y el sábado. La razón de semejante corte obedece a la rotura de un caño maestro en Vistalba, un acueducto al que el titular de AYSAM (Aguas y Saneamiento Mendoza), Richard Battagion, calificó como "la arteria aorta del sistema de agua potable", en esta zona de la provincia.

Unos 250.000 mendocinos estarán afectados por el inconveniente.

El caño, que tiene la potentísima capacidad de transportar por segundo el 10% del caudal promedio de l río Mendoza, acusó una pérdida preocupante el martes pasado.

Las autoridades detectaron la rotura y fueron hasta la zona cero del problema: la esquina de calle Viamonte y Los Peralitos, frente al barrio Cordón del Plata, en Vistalba, Luján.

Hubo que hacer un gran hueco de tres metros de profundidad por dos de ancho para dar con la base del acueducto, justo donde está la pérdida y empezar a extraer con una bomba el agua acumulada.

Pero, el arreglo implicará seguramente ampliar la perforación romper parte de calle Viamonte, que en ese tramo había terminado de ser asfaltada hace 20 días por el la Municipalidad de Luján.

El titular de AYSAM, Richard Battagion, explicó que "la reparación del acueducto es urgente pero vamos a esperar hasta el viernes 24 porque tenemos la expectativa que el clima nos acompañe".

Es que nadie quiere cortar el agua con las altísimas temperaturas reinantes y el termómetro marcaría un descenso a partir del sábado.

Los distintos pronósticos meteorológicos anticipan una jornada agobiante para el viernes 24 con una máxima de 38 a 39 grados y una mínima de 25 grados.

Pero el sábado la máxima descendería a 31 grados por la presencia de tormentas.

El funcionario indicó que el viernes se comenzará a trabajar en la tarde que "el corte y la baja presión se va a sentir en la noche y madrugada del sábado para que para que a la mañana ya esté resuelto el problema y empezando a reestablecerse de a poco el servicio.

También confirmó que se va a ver afectado todo el Gran Mendoza, pero que cuanto y como dependerá de la reparación que realicen.

"Tenemos tres estrategias previstas: una reparación simple, que nos llevaría unas 4 horas; otra intermedia que insumiría entre 8 y 10 horas y la última más grande que sería de más de 12 horas. Lo que se haga dependerá de que nos encontremos debajo del caño cuando cortemos el agua y evaluemos el daño en el acueducto".