La audiencia de avenimiento fue convocada por un Juzgado Civil y Comercial, pero se trata de una reunión de partes, donde el Estado que pretende expropiarle bienes a un privado le hace una oferta económica. A fin de que tuvieran un tiempo prudencial para resolver si aceptan o no, se fijó un cuarto intermedio de cinco días hábiles.

Hoy, técnicamente la contraparte, en este caso los representantes de los accionistas, los cuales certificaron ser quienes están registrados ante la Inspección General de Justicia, deberán aceptar o rechazar formalmente la propuesta del gobierno.

Los abogados Juan Ignacio Chachero de Trelew y Oscar Gélvez de Mar del Plata se constituyeron en los tribunales para participar de la audiencia en carácter de representantes de la sociedad anónima Alpesca, y a tal fin, exhibieron las actas de directorio refrendadas por la Inspección General de Justicia. En ese organismo, se presentaron días atrás, nuevas actas del directorio donde se anuncia los cambios en la composición accionaria. La empresa Lumini SRL de Mar del Plata, cuya propiedad es del empresario Renato Aleua, pasa ahora a tener el control de 55 por ciento de las acciones de Alpesca, y el remanente de las acciones las tiene Federico Otero, según expusieron los letrados durante la audiencia pasada.

Tal como lo habían expresado públicamente Federico Otero y Renato Aleua, hoy rechazarían los 114 millones, porque en realidad consideran que los barcos de la flota pesquera, más la planta de procesamiento tienen un valor de mercado de 600 millones de pesos.

Ante estas circunstancias, y fracasada la audiencia de avenimiento, lo que se dará inicio a partir de ahora es el juicio de expropiación propiamente dicho. Donde los accionistas podrían ofrecer peritajes de parte que sustente el valor solicitado y a su vez, el juez que tramita la causa, podría también convocar a otro medio de tasación, tras lo cual sí definirá el monto que se asignará como resarcimiento por la expropiación. Más tarde y dictada la sentencia, el Estado deberá hacer el depósito judicial correspondiente, y quedará homologada la expropiación.

Harina de otro costal serán las inhibiciones o pedidos de embargo que pudieran recaer sobre ese juzgado en cuanto a las acreencias existentes sobre Alpesca, por lo pronto, desde el STIA planean solicitar una andanada de embargos personales por cada uno de los trabajadores que tienen salarios impagos.