La Eurozona tendrá su pequeño fondo monetario. La Corte Constitucional alemana dio ayer su visto bueno a la ratificación germana del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescates permanente de la zona euro sobre el que se basa el andamiaje preparado para salvar, por ahora, las deudas española, chipriota e italiana y seguir prestando plata a Grecia, Irlanda y Portugal.

Los ocho jueces de Karlsruhe, sede del primer tribunal germano, dictaminaron ayer que la participación alemana en el MEDE no es contraria a las leyes alemanas ni viola competencias del Bundestag, como alegaron los más de 37.000 denunciantes, entre ellos diputados de la coalición de Angela Merkel. Los denunciantes también consideraban que el MEDE pone en riesgo las cuentas públicas alemanas.

Los jueces impusieron varias condiciones. La participación alemana no puede superar los 190.024 millones de euros –es decir, que el fondo no tendrá más de 500.000 millones– salvo que la mayoría absoluta del Bundestag autorice al gobierno una ampliación de su contribución. “Ninguna cláusula de este tratado puede ser interpretada en un sentido que establezca obligaciones de pago superiores para la República Federal de Alemania sin el acuerdo de los representantes alemanes”, dice la sentencia.

Además, impusieron la condición de que el MEDE no pueda tener una ficha bancaria, es decir, que no se pueda financiar ante el Banco Central Europeo (BCE), como varios gobiernos del bloque llevan tiempo pidiendo. Eso le daría una potencia financiera infinita pero constituiría una violación de los tratados europeos, que prohíben la financiación monetaria de la deuda.

La decisión de los jueces de Karlsruhe alivió a Berlín, Fráncfort –sede del BCE– y Bruselas, pero es contraria al parecer de la mayoría de los alemanes, que en los sondeos previos publicados por la prensa pedían que se vetara la participación alemana en el MEDE, algo que hubiera dejado al euro a los pies de los mercados, porque el fondo temporal, el FEEF, se extinguirá a mediados de 2013. Además, el alto tribunal decidió que todas las decisiones importantes que tome el MEDE deben ser ratificadas por el Bundestag .

El Constitucional también rechazó varios recursos de urgencia contra el Pacto Fiscal de la Eurozona y decidió, aunque la sentencia no versaba sobre eso, que el programa de compra de bonos anunciado la semana pasada por el BCE no es ilegal. La decisión, aunque era previsible, recibió aplausos de los mercados, con la caída del riesgo-país español e italiano y la suba del euro con respecto al dólar hasta niveles que no se veían desde mayo, rozando los 1,29 dólares por euro.

Si alguien esperaba ayer la decisión con un nudo en el estómago era Merkel. La jefa del gobierno alemán se dirigió a los diputados en el Bundestag, apenas media horas después del anuncio del tribunal, para decir que ayer había sido “un gran día para Alemania y para Europa”.

El presidente del Eurogrupo (que reúne a los ministros de Finanzas del euro), el luxemburgués Jean-Claude Juncker, aseguró en un comunicado que la primera reunión del MEDE se celebrará el próximo 8 de octubre.

El ministro español de Economía, Luis de Guindos, otro de los que ayer respiró aliviado, dijo, según la agencia EFE , que la decisión era “una buena noticia” que “pone de relevancia los esfuerzos que se están haciendo para acabar la crisis de la zona euro”.

Con el MEDE en funcionamiento, Bruselas está a la espera de que España se decida finalmente a pedir el rescate. En ese caso, y a cambio de un durísimo ajuste para cumplir estrictamente con la reducción del déficit exigida por las normas europeas, el MEDE podría comprar bonos españoles en las subastas de deuda a la vez que el BCE compra en el mercado secundario para mantener el riesgo-país controlado. Pero el primer paso lo tiene que dar Madrid.

Y el gobierno español, con la fuerte bajada el riesgo país en las últimas semanas, podría volver a pensar si pide un rescate.