Alerta: se incrementa el número de cesáreas en la región

Alerta: se incrementa el número de cesáreas en la región

Cada vez son más las mujeres que en América Latina, y en Argentina en particular, rechazan la idea del parto natural. Lo que se debe saber para tomar la mejor decisión.

En las últimas décadas comenzó a incrementarse significativamente el número de mujeres que elige dar a luz a través de cesáreas, así como la cantidad de profesionales de la salud que las recomiendan. Sin embargo, gran parte de la comunidad médica rechaza este tipo de intervenciones siempre y cuando no sean estrictamente necesarias. 

Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tasa de nacimientos por cesárea en cada país no debería exceder el 15%. Sin embargo, según los datos del Estado Mundial de la Infancia de Unicef, en América Latina la cifra se sitúa muy por encima: el 38%. 

En nuestro país, un estudio del departamento de Investigación en Salud de la Madre y el Niño del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS) demostró que los números de la Argentina también están muy lejos de las recomendaciones de la OMS. Según se comprobó, las cesáreas significan un 25% de los nacimientos en el sector público y hasta un 50% en el privado. 

Potenciales riesgos 

En diálogo con Hoy, la licenciada en Obstetricia egresada en la Universidad Nacional de La Plata Beatriz Valente explicó que estos elevados porcentajes responden a diferentes factores: “Muchas mujeres dicen preferir este procedimiento debido al temor al parto, a sentir dolor, por el miedo a experiencias traumáticas contadas por personas cercanas o con influencia”, afirmó. Y agregó: “Consideran que, al programar la cirugía, evitan todos estos posibles sucesos, desconociendo  que la cesárea es una intervención quirúrgica en la que se exponen a riesgos como en cualquier otra intervención”. 

En este marco, Valente explicó que los riesgos a los que hace referencia tienen que ver con “hemorragias, infecciones, problemas menores en la cicatrización o futuras complicaciones en el próximo embarazo -como lo son la anómala inserción placentaria, que sucede en dos o más cesáreas anteriores-“. 

Sin extremismos

Más allá de los potenciales riesgos, las cesáreas en sí mismas fueron un gran avance de la ciencia médica. Por eso, lo que se rechaza no es la intervención sino que se practique cuando no es necesaria. “Las cesáreas son de gran utilidad ante una urgencia materna y/o neonatal, cuando una o ambas de ellas corre riesgo de vida. La hospitalización de un hecho natural, como es el parto, se implementó para disminuir la mortalidad materna-neonatal. Siempre que sea con un echo justificado y no porque sí, la cesárea debe tomar la importancia que merece”, apuntó. 

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