En esa coyuntura le deseó suerte y anticipó que continuará haciendo política y que aportará desde una oposición constructiva.

Como ya los había anticipado, ayer, Aída Ayala ratificó que ahora llevará adelante el rol de ciudadana. "Eso es lo más hermoso que nos puede pasar”, dijo agregando que trabajó toda su vida y que ahora quiere descansar. No obstante, anticipó que no perderá su función de militante: "No me voy a ir de la política, voy a seguir trabajando con la Fundación Construir, donde tenemos un equipo muy bueno y joven. Soy muy respetuosa del papel que la voluntad popular nos otorga, y hoy la mía es esta, la de ser opositora. Una oposición constructiva”, dijo, aclarando luego que no es necesario ejercer un cargo "para aportar al cambio” que comenzó con Mauricio Macri como Presidente.

A Capitanich le deseó "toda la suerte", precisando que es un dirigente "capaz y que tiene experiencia". Y agregó: "La que llega tiene que ser la Argentina de la concordia; Domingo Peppo en la Gobernación y Jorge Capitanich como intendente van a tener la oportunidad de hablar con Mauricio aunque piensen distinto”, expuso.

"Que no pase como con la expresidenta, no quiere decir que yo vaya a hacer lo mismo. Porque esto que estoy haciendo es lo normal, es lo que se debe hacer, es respeto a las instituciones que no mostró Cristina”, expuso Aída Ayala respecto de la no concurrencia de la expresidenta a la entrega banda y bastón a la casa Rosada. Y dejó una queja finalmente: "Cumplí con mi obligación con Capitanich y con la voluntad popular, pese a que se convirtió este acto institucional en un acto peronista y kirchnerista, cosa que no comparto. Y como no tengo avión privado, no puedo llegar a la asunción de Mauricio”, lamentó.